Cosas Perdidas

Los niños sólo piensan en una cosa: ¡jugar todo el tiempo!, nada más por eso tienen que ver Cosas perdidas. Esta intervención escénica propone que el juego es una herramienta que ayuda a los pequeños a conectarse con su entorno, comunicarse y aprender a solucionar problemas.

Bajo la dirección de Verónica Contreras, los actores, Adrián Hernández, Flor Sandoval y José Agüero, encarnan a tres barrenderos que al convivir cotidianamente se cuestionan sobre su forma de vivir. Así surge la idea de usar el juego como un canal de comunicación que promueve la creatividad y la interacción.

Esta puesta en escena de la compañía Teatro al Vacío también busca que el público adulto reflexione sobre la importancia de tomarse tiempos de ocio para convivir con sus hijos y ver algunas situaciones de la vida desde una perspectiva infantil.