Lugares para visitar cerca del Metro Candelaria

Un buen lugar para los basquetbolistas (hay nueve canchas y una liga). También tiene un campo de futbol. Muchos corredores aprovechan este deportivo por su pista de arcilla completamente plana y en buenas condiciones, pero lo más interesante es que lo diseñó en 1929 el arquitecto Juan Segura, el mismo que construyó el Edificio Ermita, en Tacubaya, y el Edificio San Jorge, en el Centro Histórico. De ahí la intención art decó que todavía se aprecia en parte. Atrás de este deportivo se juega pelota mixteca.

Los Rolling Stones filmaron un video aquí en los noventa. Hoy casi nadie se acuerda (ni del templo ni del video). El leprosario de San Lázaro se construyó en los mismos terrenos donde Hernán Cortés erigió la primera edificación española: el edificio de las Atarazanas. Una placa lo anuncia, pero ni quien la mire. Tampoco quien visite este extemplo abandonado que ¿sobrevive? en el predio de una empresa que no se ha dedicado a darle mantenimiento. ¿Y si tocamos el timbre y les decimos que por favor nos dejen entrar? También podríamos ofrecerles limpiarlo.

Hay que sacar cita antes. Resulta que el museo está dentro de la Cámara de Diputados, así que se ponen pesados en la puerta. Una vez dentro, se olvidan los corajes y se disfruta de un museo candoroso, bien montado, didáctico, como para llevar a los sobrinos y que aprendan de tocho morocho acerca de las leyes y los diputados. No es tan aburrido como suena, en serio. La entrada es por Sidar y Rovirosa.

Qué ternura que se llame así, ¿a poco no? Es por pequeño y por su proximidad al antiguo puente de San Jerónimo, pero este templo no es poca cosa. Data del siglo XVI, por ejemplo, y se cuenta que debajo está o estuvo enterrado un tesoro. La sencillez de su modesto campanario atrae a vecinos, curiosos y alguno que otro lector de esta revista. Es una de las iglesias menos conocidas del Centro, vale la pena echarle un ojo.