La muerte de la gran bailarina Pina Bausch y el trabajo escénico de Rosas Danst donde los cuerpos se repetían en movimiento, llevó a la coreógrafa y bailarina Roxana Valdez a crear este proyecto que combina el arte sonoro, la fotografía, la danza y la iluminación.
Resonancia: Movimiento. Luz. Sonido es una puesta en escena que busca generar una experiencia multisensorial a través de la interdisciplinariedad. Para ello Roxana buscó que el arte sonoro y la iluminación no fungieran como elementos más de la danza, sino como integradores del concepto de lo resonante.
El espectáculo se ha presentado desde 2010 en el Centro Nacional de las Artes y en la 5ª Muestra de Artes Escénicas. Ahora regresa con mayor background, pues su creadora viajó a Berlín a realizar un proyecto llamado Transferencias, sobre apreciación de diferencias artísticas y estéticas; así como el MAM, un encuentro de artistas marroquíes y europeos. Ambas colaboraciones han servido para mejorar la investigación sobre el arte escénico y llevarlas a escena en esta nueva temporada de Resonancia.