El pionero
El padre de los programas de concursos musicales es Eurovisión, que por primera vez se transmitió en 1956, con la intensión de unir a los países europeos de la posguerra por medio de la música. Cada nación tendría un representante para interpretar una canción. Además de sus implicaciones sociopolíticas, el proyecto fue un experimento tecnológico, ya que su intensión era transmitirse simultáneamente en vivo a 52 países. Aún vigente y con 60 ediciones, es el programa más antiguo de la historia de la televisión.