Desde sus orígenes en Grecia, el teatro promovía la convivencia del pueblo mediante temas que pretendían dar enseñanzas sobre la vida. Actualmente hay un estigma sobre el teatro como una actividad de las élites, pero gracias al entusiasmo de compañías emergentes, como Chiles Secos Teatro, se generan nuevos senderos para integrar a más públicos.
Con el Primer ciclo de Teatro Revoltijo, las compañías independientes Chiles Secos y Cómeme mezclan el talento teatral universitario en monólogos, entremés, sketch y la dramaturgia mexicana contemporánea.
Desde obras de Antón Chéjov y Miguel de Cervantes Saavedra hasta adaptaciones y lecturas dramatizadas integran las actividades que durante los sábados de junio podrás observar en el marco del festival.
El sábado 15 se presentan obras del siglo de oro, Prendido del pecho de su amada y La cueva de Salamanca, montajes de la compañía Mecate. El sábado 22 habrá una lectura dramatizada de Cuando volvamos a oler la sangre, y el sábado 29, la creación colectiva Martes líquido, corazón... dirigida por Yael Carranza.