Canto general, de Pablo Neruda, es un poemario épico en el que se narra la historia de Latinoamérica, desde México hasta Argentina. Raíces: América de punta a punta, de Jorge Marín, tiene la misma intención, y pretende lograr esa hazaña pero desde la perspectiva del arte.
El artista michoacano, creador de las alas de ángel más famosas de Reforma, presenta 10 obras gráficas y 16 esculturas que muestran la mezcla de Occidente y Mesoamérica, las tradiciones fundidas, la evolución de las sociedades y la creación de nuevas culturas.
Las esculturas, como una metáfora de los mestizos, están formadas por una combinación de cobre y estaño. Son cuatro jugadores de pelota, con cuerpos atléticos y alas en una clara alusión a la unión de diferentes razas en el continente americano. A pesar de tener la capacidad de volar, están anclados en sus raíces por medio de su pelota, elemento que representa su eje para fijarse en la tierra.
Las estatuas representan cuerpos en perfecto equilibrio, sus rasgos humanos se trabajan hasta en detalles mínimos, casi con una definición quirúrgica. Estas figuras traducen la inquietud de Marín por encontrar una identidad colectiva mediante el arte.
También observarás una escultura de un padre y una madre que cargan en brazos a su hijo. Esta pieza es una metáfora de la creación de América como una nueva estirpe, una raza cósmica, que no está peleada con su pasado y no refuta su presente. Entra las figuras que verás en la exposición se encuentran Jugador Kusama, Salam y Jorge alado.
Esta colección comenzará un viaje por varios países de América Latina, igual que alguna vez lo hizo Neruda y sus poemas. El arte se convierte en un recordatorio de nuestro pasado y la necesidad de construir puentes para crear un futuro sólido.