La eterna juventud y la inmadurez son los ejes principales de una de las compañías de danza contemporánea más llamativas de Japón, Condors, que regresa a la CDMX para presentar un ejercicio dancístico de carácter performático basado en la cultura de masas y en la fragilidad de nuestra realidad.
En la obra de danza Grandslam "Muerte súbita" verás movimientos cargados de humor en escenas desconectadas entre sí acompañadas de coloridos e inusuales elementos como marionetas. Dichos movimientos, aparentemente aleatorios, cobran sentido en el momento que la nostalgia, las referencias de la cultura pop y las peripecias de la sociedad contemporánea desatan un sentimiento de nostalgia y ánimos de revalorización de las cosas esenciales del ser humano en el espectador.
Dirigida por el bailarín y coreógrafo Ryohei Kondo este colectivo retoma, desde 1996, la esencia japonesa de la danza; más humana y comprometida con las raíces del ser humano, al mismo tiempo que se vale de escenas de películas y referencias de la cultura popular occidental como escenario de expresión.
Para Condors las convencionalidades no tienen lugar, por lo que sus integrantes, en su totalidad hombres, no necesariamente son bailarines; entre ellos se encuentra lo mismo un filósofo que un barman o un artista visual. Todos expresándose de una manera honesta e irreverente.