Percy Jackson y el mar de los monstruos

Ojalá Percy Jackson 2 tuviera más personalidad y un poco de carisma independiente, porque en el fondo tiene su encanto. De alguna forma nos lleva a las aventuras juveniles de los 80, como 'El secreto de la pirámide', mezclando con mucha soltura este espíritu juguetón lleno de peripecias fantásticas con el imaginario mitológico griego, que va desde 'Lucha de titanes' hasta los dibujos animados más naïf de la 'Pequeña Polonia', pero ahora desde el prisma de la generación 2.0. Sin embargo, esta segunda parte parece empeñada en apostar por paisajes imaginarios ya desarrollados, por lo que termina siendo un híbrido entre 'Harry Potter', 'Piratas del Caribe', 'Narnia' y, incluso, 'Indiana Jones'. Un 'fastfood' hipertrófico para nostálgicos de la épica heroica infantil con menos lustre que su predecesora pero con las suficientes armas para entretener.