Hola y chau, papá

¿Qué pasa cuando las cabezas de la familia no se entienden y deben separarse? De esto habla Hola y chau, papá, una obra de teatro para niños que incluye mensaje para los adultos.

El texto de María Inés Falconi, dirigido en esta ocasión por Enrique Monzuazo, se centra en una niña de siete años de edad, Lucía, y en uno de los momentos más complicados de su corta vida: la ruptura matrimonial de sus padres.

En el proceso, hace una selección de objetos personales para decidir cuáles estarán en la nueva casa de papá y qué otros permanecerán en la “casa de siempre”. Juntos, Lucía y sus padres, deben aprender cómo continuar sus vidas de manera separada.

Aunque la obra va dirigida al público infantil y muestra cómo reaccionar ante los cambios, Hola y chau, papá también es una invitación para que los adultos reflexionen sobre el proceso de los pequeños cuando los padres deben separarse.

Además del mensaje, la puesta en escena motiva a los niños a utilizar su imaginación. Aunque en los primeros minutos se proyectan algunas imágenes al fondo del escenario, el resto de la obra transcurre con un fondo negro y los actores apenas se apoyan en la utilería –como una puerta o una muñeca– o en movimientos corporales para guiar al público por el mundo de Lucía.