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Este thriller de crímenes muestra al mundo la ciudad de Nueva York de los hermanos Benny y Josh Safdie, de una forma engreído, sucia y eléctrica. Cuenta con Robert Pattinson con su mejor actuación como Connie, un oportunista carismático y de pensamiento rápido al que conocemos por primera vez sacando a su hermano con deficiencia mental Nick (Benny Safdie) de una sesión de terapia para robar un banco. Connie es violento y peligroso, pero también ingenioso y carismático, por lo que es una compañía divertida y gratificante, al menos para nosotros; no para aquellos a quienes conoce. Acabas preguntándote qué es mejor para su hermano Nick: ¿la razón fría de una institución o la compañía salvaje pero nutritiva de un hermano?
Una vez que termina el trabajo del banco en Brooklyn, se dirige al sur, la película se mantiene en movimiento, corriendo, golpeando, cayendo y tropezando durante 24 horas mientras la lluvia nos arrastra por calles, vehículos, hogares, cárceles, hospitales y parques temáticos. Corriendo a toda velocidad por la alcantarilla de la ciudad, todo se dispara en un estilo sucio, del mundo real, aunque la fotografía de Sean Price Williams también se presenta con un tema neón y escarlata (y baña algunas escenas en rojo burdel) no es la única referencia que nos acerca a los primeros años de Martin Scorsese (echa un vistazo a Robert Pattinson caminando por la calle encorvado como Robert De Niro en Taxi Driver). También cuenta con un excelente marcador electrónico palpitante de Daniel Lopatin, también conocido como Oneohtrix Point Never.
Pattinson es excelente en esto, sin duda su mejor actuación posterior a Twiglight hasta la fecha: es rápido y grosero, pero también le da al personaje un brillo en los ojos y una chispa en el cerebro -siempre es algo más que simplemente malo. Los hermanos Safdies son ostentados cineastas, sin duda, este es obra maestra de dirección. Pero lo que hace que la película sea algo más que un thriller tremendamente entretenido, lo claro que tiene el mundo que lo rodea. Eso se expresa mejor en la profundidad de los personajes secundarios que conocemos en el camino, presentando apariciones rápidas pero gratificantes de, entre otros, Jennifer Jason Leigh como desfavorecida amiga de Connie y Barkhad Abdi como guardia de seguridad. A veces es brutal, pero también tremendamente emocionante.