Dos historias nada decentes, Alan Bennett

Dos historias nada decentes, de Alan Bennett

En un mismo ejemplar, las historias de dos mujeres maduras con desenlaces muy interesantes

Publicidad

En un mismo ejemplar, dos historias de mujeres maduras con buenas dosis de humor negro y una que otra reflexión sobre la vida.

La primera mujer recientemente enviudó y para sanear sus finanzas trabaja como falso paciente para que futuros médicos practiquen. Una vida simple y monótona hasta que renta un cuarto a dos estudiantes quienes, luego de incumplir con el pago mensual, le proponen saldar la deuda teniendo sexo ante sus castos ojos. Obviamente acepta, de lo contrario no habría relato que contar, ¿no crees?

La segunda historia versa sobre una mujer que todavía tiene marido y sin penurias económicas. Su única preocupación es la mujer que eligió su hijo para desposar. No está a su altura, es demasiado fea y con desmesurados defectos. Un policía entra a juego y contribuirá a poner las cosas en orden, aunque buscaba justo lo contrario.

Ambas historias reflejan eso que la mayoría cree sobre la vejez, época en la que se supone que todo está resuelto, sin posibilidad de novedad alguna, logrando una crítica ácida y emocionante no sólo sobre la "tercera edad", también sobre los atavismos que, al menos en este caso, se rompen.

La próxima vez que tu abuela/o te platique de su nuevo proyecto, lo verás con otros ojos.

Dos historias nada decentes
Alan Bennett
Anagrama, 2013

Recomendado
    También te puede gustar
    También te puede gustar
    Publicidad