Andrea Fraser podría ser demasiado polémica para tener una retrospectiva en su país, Estados Unidos, pero llega a México con su primera muestra individual y es una oportunidad de acercarse al trabajo de una de las artistas más relevantes e incisivas del arte contemporáneo.
Fraser lleva más de 30 años observando y cuestionando a través de su práctica artística —que incluye performance, textos, instalaciones— las estructuras políticas y económicas, los roles, los protocolos y las motivaciones de los diferentes agentes del campo del arte. Lo hace con un toque de humor y de provocación pero con una vasta investigación detrás de cada obra.
Ya sea escenificando una visita al Guggenheim de Bilbao con una audioguía (Still from little Frank and his carp) y tomándose las instrucciones demasiado en serio, parodiando los personajes y protocolos de un discurso de inauguración en un evento de arte (Official Welcome, y de forma similar, Inaugural Speech) o haciendo una grabación de un encuentro sexual con un coleccionista (Untitled), su obra más polémica que es una picante metáfora de la prostitución del arte; en cada proyecto Fraser interroga sobre las dinámicas del campo artístico y nadie sale indemne.
La exposición curada por Cuauhtémoc Medina y Hiuwai Chu se organizó con el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) y reúne una selección de obras que darán mucho que reflexionar. Como describe Medina: “Es una exposición que, mi colega del MACBA y yo tratamos de organizar de modo que sea, no solamente una experiencia instructiva, inteligente, reveladora, sino extremadamente seductora y por momentos hilarante”.