Imprimir la totalidad del contenido de Internet ya no es irrealizable. Esto se le ocurrió a Kenneth Goldsmith, poeta y creador de la plataforma avant garde UbuWeb, para homenajear al prodigio y activista de la tecnología Aaron Swartz fallecido en enero pasado. Convocó a los cibernautas a imprimir cualquier contenido de la world wide web y mandarlo por correo postal a la Ciudad de México.
Hoy, 10 toneladas de papel impreso reposan sobre los 500 metros cuadrados de la galería LABOR. Este proyecto colaborativo que busca materializar lo intangible ha levantado polémica entre los defensores del ambiente, quienes califican la obra como un “desperdicio de papel”. Sin embargo, dicha cantidad es tan sólo una milésima parte de todo el material que se encuentra en la red de redes.
Goldsmith se inspiró en el trabajo de Swartz, quien se suicidó a los 26 años de edad tras ser acusado de robar millones de documentos del sitio de publicaciones académicas Journal Storage (JSTOR), para repartirlos gratis en Internet. El joven, quien protestó contra la la iniciativa antipiratería SOPA, luchó hasta el final de su vida para alcanzar el acceso libre a la información.
Aunque Priting Out Internet pareciera ir en contra de la propia naturaleza del Internet (¿para qué imprimir contenidos web si los podemos visualizar en cualquier dispositivo digital?), nos invita a la reflexión: sí, imprimir el contenido web resulta una idea imposible, pues la cantidad de información que generamos es infinita pero, ¿cuál es el uso que le damos a esta descomunal fuente de datos?
Dentro de las actividades paralelas a esta muestra se harán lecturas de todo el material que llegó a la galería. Visítala, tal vez tu foto de perfil se encuentre impresa.