Los volcanes generan tanto admiración como temor. En la antigüedad, incluso eran considerados dioses, y la mitología mexica tiene toda una historia del surgimiento de gigantes como el Popocatépetl (el cual recientemente dio mucho de qué hablar).
El arte no es ajeno a toda esta imaginería alrededor de los volcanes, y decenas de artistas los han retratado en sus cuadros. Ahora el Museo de Arte Moderno reúne las pinturas de volcanes para armar la exposición Eje Neovolcánico. Aproximaciones artísticas al paisaje ígneo que tiene tanto pinturas del extraordinario Dr. Atl, como algunas de Juan O’Gorman y Alice Rahon.
Los núcleos temáticos de Eje Neovolcánico
Eje Neovolcánico se estructura en cuatro núcleos. Tiene tanto documentos como fotografías, videos y, por supuesto, pinturas y diversas obras de arte. El primer núcleo tiene un abordaje científico y naturalista; el segundo se enfoca en el Paricutín, un volcán reciente y reflexiona sobre su nacimiento y miradas desde el arte.
Ahora, el tercero aborda la arquitectura y los modelos para habitar. ¿Cómo estos volcanes cambian, nutren y ayudan el paisaje? El pedregal y la piedra volcánica son fundamentales en esta parte. Para terminar está el núcleo titulado Paisaje social y cultura popular, que revisa la transformación de un fenómeno natural en un espectáculo moderno, y su inclusión en la cultura de masas transnacional.
Los artistas que veremos
En total la exposición guarda 162 piezas y cuenta con la participación de muchos y muchas artistas. Como Adela Goldbard, Tania Ximena, Mariana Paniagua, Sofía Echeverri, Marianna Dellekamp, Circe Irasema, Rodrigo Pimentel, Artemio Rodríguez, Alonso Cedillo, Aldo Álvarez Tostado, Germán Venegas, Pedro Reyes, Gerardo Murillo, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco, José María Velasco, Cecil Crawford O’Gorman, Juan O'Gorman, Carlos Orozco Romero, Alfredo Zalce, Jorge González Camarena, Max Cetto, Manuel Álvarez Bravo, Armando Salas Portugal, Tomás Montero, Luis Nishizawa, Wolfgang Paalen, Olga Costa y Alice Rahon.
Sin duda el currículum de esta exposición es muy amplio y más que interesante. Creemos que en general no es espectacular, pero ver obras de Dr. Atl y Alice Rahon, y fotografías de Manuel Álvarez Bravo siempre vale la pena. Sin mencionar que nos sorprendió ver piezas de Luis Nishizawa.
Los volcanes tienen una belleza aterradora, y esta exposición lo explora muy bien, ¿se te antoja para ir?
Recomendación. Casi oro, casi ámbar, casi luz. Bienvenida del paisaje mexicano al paisaje japonés.
