Lukas Avedaño
Foto: Cortesía Mario Patiño

Danza-Poesía, Artes plásticas y Música en la comunidad LGBTQI+

Tres artistas, distintas disciplinas artísticas y una comunidad en resistencia

Escrito por
Time Out México colaboradores
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Desde el uso de la tela en el arte contemporáneo y las artes escénicas como práctica ideológica, hasta el performance como impulsor de la libertad. Esto platicamos con Damián Suárez, Lukas Avedaño y Sage Skylight tres artistas, parte de la comunidad LGBTQI+, cuya historia merece ser contada.

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Entrevistas por Alex de la Parra

Damián Suárez

El textil ha sido producido desde que aparece el proceso civilizatorio humano en casi todas las culturas y apropiado por el arte, inicialmente para promover la exploración de la abstracción mediante una técnica típicamente asociada con la esfera doméstica y el trabajo femenino, desde artistas como Anni Albers y Shila Hicks. El uso de la tela en el arte contemporáneo, ha revolucionado y representado un fenómeno antropológico entre el folk y el high art con trabajos de artistas como Alighiero Boetti, El Anatsui y el artista venezolano-mexicano Damián Suárez entre otros.

La dicotomía en el concepto y proceso como artista de Damián, empieza desde sus orígenes en una familia muy ligada a los procesos políticos centralizados y una profunda desigualdad durante los años 70 en Venezuela. Ligado a un núcleo familiar en el que predominaba la violencia, la carencia y el vicio por parte de sus padres, Suárez fue adoptado por sus abuelos, pero tuvo que migrar al poco tiempo ya que su vivienda quedó destruida en un temblor. A pesar de las condiciones, Suárez siempre tuvo una actitud positiva con una inclinación y talento por las artes, por lo que aprendió diversas técnicas de bordado con una vecina y he ahí cuando el viaje de Damián comenzó.

Pasó de la vulnerabilidad social, a un escape tanto filosófico, como literal, el cuál lo llevó a migrar a países como Chile, donde tuvo una corta, pero exitosa carrera en televisión y más adelante su actual hogar, México. Iniciando bajo diversas disciplinas como la fotografía, Damián encuentra su área de desarrollo en el arte textil, en donde descubre un balance entre el arte abstracto y la geometría. El artista ve el hilo “como una estructura flexible que ha aprendido a manipular con un impulso animal”, cuestión que en cierta manera lo regresa a sus orígenes en la selva donde creció.

La expresión de Suárez ha sido valorada por el nicho y ha florecido mediante el juego que desenvuelven sus armados armónicos, la exhibición y el proceso creativo de sus piezas. Sus colecciones funcionan con el mundo óptico y la abstracción. Es un artista numérico que crea piezas que funcionan arquitectónicamente con el espacio y con la luz que reflejan. Por ejemplo, su obra “La sombra” (2014), inspirada en las pirámides precolombinas, la cuál dependiendo del ángulo en que se mire crea fenómenos ópticos perceptivos. Por ende, es acertado mencionar que México ha sido su mayor inspiración para el desarrollo de su actual etapa como artista.

Más allá de sus obras, Damián confía en un espíritu comunitario, por el que ha colaborado con Arte vivo, Acción Solidaria y principalmente con su estudio/galería. SS Galerie, localizado en la colonia Condesa, funciona como espacio comunitario para la producción y recreación de distintas disciplinas como diseño, cocina, yoga y principalmente arte. El estudio adopta como pilares la inclusión, el feminismo, la identidad de género, la positividad y la aportación cultural.

Actualmente el estudio está recibiendo residencias totalmente pagadas para que 4 nuevos artistas vivan dentro la casa bajo un proyecto en el cual estarán enclaustrados en un espacio lúdico, ridículo y recreacional. El proyecto estará grabado, escenificado como cavernas y en sí será un conjunto de obras entro de una obra de Suárez. En agosto, el artista expondrá su obra Superficies Inestables con una revisión de su obra en el Claustro de Sor Juana, además de estar activo en diversas galerías y espacios de México y otros países.

@suarezstudios
@ss_galerie

Lukas Avendaño

Investigar y reflexionarse dentro y fuera de las diversas culturas y formas de organización e interacción social es lo que Lukas Avendaño viene buscando y expresando a través de su expresión artística antropológica. Su ser conlleva raíces Zapotecas del Istmo de Tehuantepec y su identidad se define como Muxe, convirtiéndolo en uno de los creadores escénicos más reconocidos internacionalmente en la actualidad.

Al ser visto con exotismo, Avendaño problematiza su existencia como Muxe. Pero, ¿Qué es Muxe? Por una parte, es el título adquirido al formar vida circunscrita a un espacio geográfico en Oaxaca a la par del interactuar como un tercer género que asume ciertos roles tradicionalmente considerados femeninos, siendo biológicamente sexo masculino. De forma más coloquial, “es ser el coreógrafo de los quince años de las mujeres del barrio de la colonia” como dice Avendaño. Muxerismo es una forma de vivir y concebir los afectos e intentar escapar de la heteronormatividad. Fuera del Istmo y al salir de contexto, es una lucha que conlleva dolor y el ser señalado bajo todos los despectivos históricos en contra de una persona trans.

Lukas ha emprendido una vida de esplendor artístico enfocado en el performance, la poesía y la danza, empezando desde una región sin acceso a la salud, agua o luz, en la cual su padre tuvo que migrar del país para mantener a su familia y principalmente, un lugar donde piensa no hay jurisdicción. Más tarde, Avendaño sale del Istmo a los 18 años para prepararse e ingresar a la facultad de antropología a la par de artes escénicas en la Universidad Veracruzana, por el INBA, como danzante de la Guelaguetza, proyectos de Conarte y el Instituto Nacional de Arte de Nueva York.

Como él menciona, “su trabajo está permeado por una metodología basada en la cultura de paz desde el afecto y la importancia de la infancia”. Comparte un discurso que parte de la concepción individual y colectiva de la vida, ligado al derecho a la misma, al amor y la felicidad. Por dicha razón también integra un discurso político que lucha por la igualdad, un discurso que inicia con el existir, interpelar y finalmente exigir responsablemente dentro de un marco jurídico.

El artista aprovecha cada espacio en el que se presenta para llegar a otros públicos en una labor retadora y muchas veces juzgada. Más allá de reclamos, recae en temas sociales como la migración, la justicia, la doble moral y la reflexión sobre los roles tradicionales femeninos. Todo esto reflejado en obras como “Pensamiento Puñal”, “No soy persona, soy mariposa” y “Buscando a Bruno”, con los cuales lucha por la justicia y la identidad. Como dice Lukas: “Todo es una práctica ideológica”.

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Sage Skiylight

Originarie de la sexta reserva mundial del surfing, Ensenada, Ernie, mejor conocide como Sage Skiylight, refiere a su natal ciudad Baja California como “pueblo chico, infierno grande”, un lugar desolado, que, a pesar de ser tranquilo, es un lugar que en su experiencia le orilló a luchar doblemente por sus pasiones…la música y la moda. 

Desde lo 8 años comenzó a tocar el piano enfocándose en música clásica y en las bases del cuarto arte. En su adolescencia aprendió a programar en garage band utilizando el teclado de la computadora como piano y subiendo todo su material a Myspace. Ernie es diseñador de moda y eventualmente aprendió a escribir canciones, lo que concretó en lo que ahora conocemos como Sage Skylight desde el 2015. Complementó sus conocimientos con ingeniería en audio y la licenciatura en producción en Guadalajara, su actual hogar.

Más allá de su talento en la producción musical, Sage Skylight es un concepto que interconecta la moda, la música, el performance y un ideal propio de libertad. Ernie es todas las identidades y ninguna al mismo tiempo, sin encasillarse “quiere pensar que no tiene sexo, porque la música es universal. Así como en la música hay distintos géneros y pueden caber en una canción, también yo de la misma manera”, dice Skylight. De igual manera se compara con una planta, que no tiene sexo pero que en muchos casos juega con una dualidad de colores y texturas, tal como su proyecto pop-rock. 

Con esta identidad propia, Sage orgullosamente pertenece a la organización Now Girls Rule liderado por la rockera Elis Parika. Desde el 2014 generan espacios para las mujeres dentro de la industria de la música, hasta su actualidad que ha desembocado en campamentos para chicas en el que se imparten clases por chicas en la industria de la música. Esto con el fin de visibilizar el trabajo de las mujeres mexicanas para que inspiren y apoyen la industria musical en México. 

En su constante lucha por no copiar la forma y el trabajo de otros artistas, Sage ha logrado desarrollar un glam-pop que nace de la construcción melódica y armónica ligada al uso primario de componer con instrumentos musicales y una escritura de letras basada en una lucha constante contra su peor “enemigay”, elle misme, Ernie. Esa esencia se puede encontrar en singles como “Watch her” y “So Cruel”.

Más allá de su dream-pop y talento musical, Sage Skylight es un espectáculo explosivo en cada una de sus presentaciones involucrando energéticas coreografías, atuendos queer-futuristas y siempre añadiendo un extra, como lo hizo al tocar el synth con uno de sus tacones, contorsionismo o explotar bazookas de confeti al público. Todo esto impulsando la libre expresión, la lucha por el respeto y la tolerancia en escenarios como el RMX y el Revolution Fest GDL, y en colaboración con artistas de la cominidad LGBTQ+ tal como el drag superstar Aviesc Who con el sencillo Manquí.

Sage Skylight se encuentra en las principales plataformas de moda y musicales bajo su seudónimo, acaba de lanzar su sencillo “Armoured” y está por lanzar dos álbumes en los próximos meses. Es alguien a quién seguirle la pista si gustas del Dream Pop. 

@SkylightSage

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