Claudia Sainte-Luce directora de La caja vacía
Foto: Cortesía CINETC
Foto: Cortesía CINETC

Entrevista con Claudia Sainte-Luce

La también directora de Los insólitos peces gato, debuta como actriz en su nueva película, La caja vacía

Anaid Ramírez
Publicidad

La directora Claudia Sainte-Luce nos dejó reposar tres años ese sentimiento de pérdida y orfandad que ocasionó su ópera prima, Los insólitos peces gato, para conmovernos igualmente con su segundo filme como realizadora y el primero en el que actúa, La caja vacía.

De nuevo se trata de una película íntima y personal, pero esta vez se enfoca en la relación padre-hijo y con un tinte más oscuro que su primera cinta. Sobre esta historia de reconciliación y pérdida platicamos con Sainte-Luce, durante el Festival Internacional de Cine de Morelia.

En tus películas tomas situaciones muy personales y las transformas en temas universales. ¿Cómo construyes esas historias?
El cine es la manera que encontré de trabajar dolores personales y entenderlos un poco. En esta ocasión trata de un miedo que surgió hace seis años, cuando diagnostican a mi papá con demencia bascular y me dicen lo que ocasionará eso. Pero ¿cómo hacerle uno para verle el lado positivo a esto y no sentirse víctima en la situación? Entonces vi esta posibilidad en estos dos personajes, el de padre e hija, su encuentro les ayuda a sanar el pasado.

Los diálogos que elijes son muy distintivos de esas situaciones. ¿Cómo los construiste? ¿Cómo seleccionaste esos detalles?
De primera mano tengo a mi padre. Luego fui a un asilo con personas que tienen Alzhéimer y demencia senil, que es más o menos como funciona la enfermedad a la que me refiero en la película. Los escuché, me di cuenta de cómo puedes repetir una cosa una y otra vez, desconocer a la gente; empiezas a ser un poco paranoico, sientes que todo el mundo te sigue. Me fijé en esos rasgos y se los metí al personaje de tal forma que evidenciara la enfermedad, pero no de una manera burda.

¿Cómo te sentiste al protagonizar tu propia película?
Ya había actuado en teatro pero no es lo mismo. En el cine tienes la cámara tan cerca y vas por fragmentos, entonces retomar lo que sentía el personaje en la escena anterior es más complicado, aunque traté de filmar de forma lineal. Entonces me sentí muy nerviosa el primer día de grabación pero creo que lo logré gracias al equipo que estuvo detrás de mí. Como directora sabía qué quería pero tenía que exigirme a mí misma y soy mi peor juez. Las primeras veces me enajené mucho y me juzgaba demasiado, hasta que empecé a soltarme y decirme a mí misma, como directora: “dale chance a Claudia (Jazmín en la película). Se puede equivocar, lo está haciendo bien, no le pidas demás. ¿Por qué tienes tanta consideración con los demás y con ella no?”. Así que empecé a tener consideración conmigo y todo empezó a fluir mejor.

¿Cómo diste con Jimmy Jean-Louis?
Necesitaba encontrar un actor de color, que hablara creole y español. Una chica nos preguntó que si habíamos visto la serie de Heroes, en la que actúa Jimmy. Pero pensé que no sería buena idea porque, aunque tiene 47 se ve de 20. ¡Iba a parecer mi novio y no mi papá! Pero pensé en que no perdía nada si hablaba con él y le mandé el guión, le gustó mucho y quiso hacer el casting, dijo que la edad se podía resolver con caracterización pero yo estaba dudosa. Un día me dijo: "iré a Haití si quieres, ven; te presento el país y si te gusta lo que hago, bien, sino ya ni modo". Ya que llegué allá, me solté, conocí el país –que es el de mi padre también–, me alejé un poco de estar observando a Jimmy y al final le hice un casting y me gustó. Pasamos a la caracterización y luego ensayamos la corporalidad: cómo camina una persona así, cómo es el habla. Fue un montón de trabajo pero es lindo porque al final vi a una persona muy diferente, y de eso se trata un poco, de crear algo que no eres. 

La caja vacía estrena el viernes 3 de marzo.

Recomendado
    También te puede gustar
    También te puede gustar
    Publicidad