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Body swap (cambio de cuerpo) es un género cinematográfico que nació en los setenta y que cada década tiene una película que se destaca de todas las demás, ya sea por su historia, actores o sentido del humor. De Jodie Foster —Freaky Friday de 1976—, Dubbley Moore —Like Father Like Son de 1988—, Rob Schneider —Hot Chick de 2002—, Lindsay Lohan —Freaky Friday de 2003— a Ryan Reynolds —The Change Up de 2011— han protagonizado filmes con esta temática y ahora es el turno de que Vince Vaughn cambie de cuerpo en la comedia de terror Freaky: este cuerpo está para matar.
Mientras el pequeño pueblo de Blissfield es aterrorizado por un demente asesino serial (Vince) la tímida estudiante Millie Kessler (Kathryn Newton) trata de continuar su vida luego de que su padre murió, pero los problemas familiares y los constantes maltratos de sus compañeros y maestros no la ayudan. Cuando menos lo espera se convierte en la nueva víctima del psicópata, que usa un puñal con extraños poderes místicos. Cuando la ataca, algo sucede y ahora Millie está en el gigantesco cuerpo del homicida y tiene un día para revertir el hechizo o se quedará para siempre ahí adentro.
El realizador Christopher Landon ya es conocido en el medio como un director que se atreve a jugar con el terror, ciencia ficción y la comedia entregando excelentes resultados (Feliz día de tu muerte, 2017) y en otras no tanto (A la mierda con los Zombis,2015). Ahora decide darle un giro ingenioso a este género burlándose de todos los clichés de Jason Voorhees (protagonista de la franquicia Viernes 13) aderezado de los típicos problemas de películas de adolescentes, logrando un buen homenaje a las películas slasher de los ochenta y noventa. Ya quisieran tener un poco de esto las películas de terror que he visto en los últimos años.
No estamos enfrente de un guion complicado, de hecho es predecible, pero eso no le quita que sea estúpidamente divertida y sus diálogos son ingeniosos porque de manera sorpresiva tocan temas actuales sociales como la toxicidad masculina, la lucha por el feminismo, la homofobia y hasta el racismo. Los chistes están en el momento que deben de estar y la sangre se desborda justo cuando tiene que hacerlo sin afectar el género de body swap haciendo que sea una mezcla triunfadora.
Si no eres fan de la sangre y cuerpos mutilados no te preocupes porque a pesar de que hay una buena presencia de estos elementos, tener a Vince Vaughn comportándose como una torpe adolescente hace que valga la pena todo, en especial por esa escena en el auto con el chico de sus sueños. La fórmula en esta película la conocemos, pero la manera en la que es planteada y llevada la hace distinguir de todas las demás.
Freaky: este cuerpo está para matar Dir. Christopher Landon. Estados Unidos, 2020. Con Vince Vaughn, Kathryn Newton, Alan Ruck y Uriah Shelton. Estreno: Jueves 12 de noviembre.
