Uno de los nombres más importantes en la historia del entretenimiento mexicano es, sin duda, el de Roberto Gómez Bolaños. "Chespirito" conquistó las pantallas del país durante más de cuatro décadas y marcó la infancia de generaciones enteras.
Falleció a los 85 años, pero su legado vivirá por siempre. Hicimos una recopilación de sus cinco personajes que marcaron nuestra infancia.
"Ahora, ¿quién podrá defendernos?"
Neurótico, enojón y ansioso. Por momentos nos recordaba a nuestros familiares mayores. Sus sketches eran los más cortos, pero no por ello menos divertidos. Acá un ejemplo.
- ¡Chaparrón! ¿Sabías que la gente sigue diciendo que tú y yo estamos locos?
- ¿Qué tú y yo estamos locos, Lucas?
Chaparrón Bonaparte no estaba loco, sólo le faltaba un tornillo (que nunca encontró).
El personaje más reconocido de Chespirito. El Chavo del 8 vivía en un barril, no tenía padres y era pésimo en la escuela. Su única alegría consistía en una mezcla perfecta de carbohidratos y proteína: la torta de jamón.
Usurpador de lo ajeno sin oficio ni beneficio. Pretendía ser el mejor ratero del barrio, pero no tenía pizca alguna de maldad.
"Más ágil que una tortuga, más fuerte que un ratón, más noble que una lechuga. Su escudo es un corazón".
