Nadie y Martin tienen varios años viviendo juntos mientras cada uno intenta triunfar en la escena artística de la Ciudad de México. Aunque ambos se aman, los problemas no se detienen hasta que llega un perrito callejero a su vida —al que nombran Ámsterdam— para darles un poco de estabilidad. El problema es que cuando terminan, los dos quieren quedarse con el perro.
De esto trata la comedia Ámsterdam, nueva producción original mexicana de HBO Max que estrenó sus diez episodios el 20 de marzo. Platicamos con sus protagonistas Naian González Norvind y Sebastián Buitrón, sobre esta serie.
En las series o el cine siempre conocemos a las parejas al inicio de su relación o al final, pero pocas veces estamos en un momento medio en el que cualquier cosa puede tambalear lo que se tiene, como sucede con Ámsterdam, ¿Qué opinan de esta manera de contar la historia?
Naian González Norvind: Eso es lo genial del guion porque es una comedia romántica que es antirromántica en muchos sentidos. Empieza con el desmoronamiento de esta relación y la pregunta de si volverán o no está todo el tiempo ahí. Al final todo queda medio ambiguo para que las personas lo interpreten de distintas maneras.
Ustedes tenían que arrancar como una pareja ya establecida, ¿Cómo formaron este vínculo?
Sebastián Buitrón: Las primeras conversaciones que tuvimos fueron de manera virtual por la pandemia, entonces nos conocimos de una manera de la que no estamos acostumbrados, pero las palabras empezaron a pesar más e importar ayudándonos a jugar con nuestra imaginación.
Naian González Norvind: Además ambos teníamos mucha fe porque tienes la buena intención de descubrir con quién vas a trabajar y ya cuando nos conocimos en persona todo se dio de manera natural porque teníamos conocimientos nuestros que ayudaron.
¿Toda la serie la filmaron en la Condesa?
Naian González Norvind: No, de hecho gran parte del rodaje lo hicimos en Uruguay porque la situación allá estaba más controlada, más de la mitad de la serie la filmamos allá. Los exteriores de la Condesa si fueron aquí, pero la gran mayoría de la serie fue allá.
Sebastián Buitrón: Los protocolos eran iguales, pero como es una población más pequeña que la Ciudad de México todo se podía controlar de una manera más ordenada. Estábamos juntos todo el tiempo y creo que también eso ayudó a que la serie se sintiera hecha por amigos.
Naian González Norvind: Totalmente, de hecho Gustavo (Taretto, el director) me confesó el otro día que agradece que nos fuéramos para allá porque solo de esa manera tuvo la relación y cercanía que tuvo con nosotros en Uruguay.
Un elemento que resalta en la serie desde el primer segundo es la música, desde el trabajo del protagonista hasta las presentaciones del bar, la música se respira. ¿Siempre fue importante o conforme la fueron hicieron fue tomando su lugar?
Sebastián Buitrón: Desde el guion, la serie era muy musical porque Gustavo es muy musical y quería que formara parte del mundo de Martin, mi personaje. Nadia también lo comparte aunque ella de manera distinta. Además de que no pudo hacerse sin la ayuda de Meme ya que fue el curador de todos los números musicales y también escogió a los músicos aunque también tuvimos sorpresas como Luciano Supervielle, el pianista que conocimos en Uruguay que es un genio, alguien reconocido en todo el mundo formando parte de Amsterdam.
Dicen que trabajar con niños y con perros en cine o series es un reto. ¿Cómo les fue con el perro protagonista de Ámsterdam?
Naian González Norvind: De hecho fueron dos perritos los que hicieron el papel, curiosamente yo tenía una excelente relación solamente con uno de ellos, me seguía por todos lados hasta que creció y ya no quería estar conmigo entonces fue difícil que me hicieran caso durante el rodaje a diferencia de Sebastián que los perros adoraban.
Sebastián Buitrón: Igual que con nosotros al principio tuvimos que conocernos para formar ese vínculo de amor entre los perros y pues nosotros. Se necesita confianza y paciencia, pero el mago de esto fue Gustavo quien sabía cómo dirigirlos y que hicieran lo que necesitaba para que las escenas quedaran perfectas.
Cuando salió el póster en redes sociales la atacaron por presentar una historia de jóvenes privilegiados viviendo en la Condesa, ahora que Ámsterdam ya se estrenó, ¿cambiaron esas reacciones?
Naian González Norvind: 100% cambió la perspectiva, la gente que la ha visto me ha escrito o buscado para decirme lo mucho que ama la serie. La historia cambió ese prejuicio que no estaba sustentado en nada porque Ámsterdam es una serie que habla de mucho tipo de personas con diferentes profesiones, edades e historias, entonces es una producción inclusiva. Aquí hablamos de las relaciones humanas, familiares, amistosas, románticas que compartimos sin importar de dónde venimos o el color de nuestra piel.
Sebastián Buitrón: La sustancia de las opiniones viene permeada de muchos conceptos previos como olas que arrastran cosas. Yo prefiero observar ya todo en la mesa para de ahí formar mi opinión para poder tomar las cosas con las que te sientes identificado. México necesita más material de distinto tiempo para que de esa forma se escuchen todas las voces existentes y esta serie es un granito para que esto vaya sucediendo.