Nuevo Orden, la nueva película de Michel Franco
Foto: Cortesía de la producción

Nuevo orden

Ya estrenó la nueva película del director Michel Franco, con la que ganó el León de Plata en el festival de Venecia

Anaid Ramírez
Escrito por
Anaid Ramírez
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México es un país de contrastes económicos. Solo es necesario echarle un ojo a la lista de las personas más ricas del mundo o la de los países con mayor cantidad de multimillonarios (ambas de Forbes), y al mismo tiempo revisar el libro Los doce mexicanos más pobres (de Salvador Frausto). O más fácil: mira hacia la ventana o lee los periódicos.

Las diferencias socioeconómicas no es tema nuevo en el cine, pero el incremento de la brecha amerita abrir la conversación en cuanto halla oportunidad. Con esa intención llega Nuevo orden; así lo afirma su director, el realizador mexicano Michel Franco. Y vaya que se ha detonado la plática, aunque más que por el tema que aborda, lo hace debido a las percepciones un tanto polarizadas hacia su filme.

La película inicia en la boda de una pareja adinerada, Marian (Naian González Norvind) y Alan (Dario Yazbek Bernal), en una mansión que pertenece a la familia de la novia. Ahí, ellos reciben como regalo sobres llenos de dinero —“el 1% de las mordidas que le han dado a mi papá”, revela Marian— y también somos testigos de otros comportamientos cuestionables; desde los roles infantiles que recibe la protagonista a sus 25 años —como reflejo de lo que seguro otras mujeres viven en su círculo—, hasta la indiferencia con que reciben a un extrabajor, quien llega para solicitarles ayuda urgente para salvar a su esposa.

De esta forma, nos queda clara la construcción de ese personaje colectivo que es el círculo blanco privilegiado. A partir de ahí, la cinta nos presentará la perspectiva de ellos ante el climax que está por desatarse. Sin embargo, es otro sector de la población el que motiva la detonación: la clase trabajadora; de ellos no se presenta prácticamente nada. Y ese es quizá el mayor error en el guion de Franco.

Si bien con el preámbulo de Nuevo orden Franco se permite mostrar los vicios de la élite, olvida por completo mirar hacia abajo. ¿Los de piel morena actúan sin motivo?, ¿quiénes son ellos?, ¿qué los llevó a tomar las calles y pintarlo todo de verde?, ¿cuáles son sus vicios? Veámoslo más a detalle. Franco, en más de una entrevista, ha apuntado hacia la concordancia de su historia con hechos actuales recientes, como el movimiento Black Lives Matter, que comenzó a partir de un hecho en concreto y como consecuencia de años de segregación. Digamos que la parte contextual no existe en este filme.

No se trata de glorificar al estrato más bajo —y amplio— del país. Pero Franco, al omitir las motivaciones de este sector, hace que Nuevo orden se perciba clasista; como una película construida a partir de las pesadillas más funestas de los ricos sobre perder sus privilegios. Son ellos los que más sufren y vaya que el director se encarga de explotar este recurso: secuencias explícitas sin motivo (al mero estilo de Después de Lucía) y violencia irracional, reactiva, por decir los menos.

Aunque al final, las consecuencias reales y colectivas las sufren los de abajo, los que no participan en la revuelta. Son ellos el chivo expiatorio, los que deben acatarse a nuevas y más complejas dinámicas de control y movilidad, los que viven en toque de queda y son más susceptibles, por la imposibilidad de dar mordidas millonarias ante los abusos oficiales.

No es la primera vez que Franco intenta acercarse a un sector ajeno al suyo (A los ojos), pero de nuevo vuelve a tropezar al omitir el pequeño detalle de no investigar o tener una proximidad real: no es suficiente con mostrar el puente de Cabeza de Juárez —que conecta Nezahualcóyotl con la Ciudad de México— para develar a la clase trabajadora.

Si pausamos el discurso, Nuevo orden se sostiene de sus elementos técnicos y su manufactura. Michel Franco logra acelerar el ritmo y desafiar su trabajo habitual al optar por más movimientos de cámaras, elencos extensos con diálogos más dinámicos y hasta efectos especiales. Pero las deficiencias de guion nos hacen cuestionar sus verdaderas intenciones, ¿habrá valido la pena empezar la conversación?

Nuevo Orden Dir. Michel Franco. México, 2020. Con Samantha Yazareth Anaya, Dario Yazbek Bernal y Patricia Bernal. Estreno: Jueves 22 de octubre.

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