Priscilla Sofía Coppola
Foto: Cortesía IMDB

Priscilla: La película que nos enseña la carcel en la que estuvo su Priscilla Presley

El nuevo film de Sofia Coppola muestra la otra cara de la moneda del matrimonio de Priscilla con Elvis Presley

Phil de Semlyen
Ángel Arroyo
Escrito por
Phil de Semlyen
Traducido por
Ángel Arroyo
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Si Elvis (2022), de Baz Luhrmann, presentó al rey del rock and roll como un hombre abrumado por su talento, las responsabilidades y, por supuesto, las malas decisiones en la vida, el drama biográfico de Sofia Coppola es una réplica ácida de esa visión. Centrado en Priscilla, su esposa, (interpretada por Cailee Spaeny), presenta una imagen muy distinta de “El Rey”. Quizá, incluso, nos sugiera que él era una completa basura. 

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¿De qué trata Priscilla de Sofía Coppola?

Está basada en las memorias de Priscilla de 1985 sobre su matrimonio, 'Elvis and Me', y con su total permiso, Coppola nos ofrece "la cara de la historia de Cilla". La película abarca diez años de su relación con Elvis (hechor por el actor australiano Jacob Elordi): desde la castidad -aunque la relación fuera completamente inadecuada por la edad (él tenía 24 años, ella 14) en una base de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en Alemania Occidental de 1959- hasta el final de su relación, cuando él tomaba pastillas y movía las caderas en Las Vegas, mientras ella criaba a su hija sola en Graceland, consumida por la negligencia y la naturaleza controladora de Elvis. 

Nuestra opinión

La cinta es un cuento de hadas retorcido que empieza con un beso en un dormitorio y termina con Priscilla encerrada en una especie de torre, contado con el estilo discreto que caracteriza a Coppola. Podríamos describir el filme como una versión hiperestilizada, ambientada en los años 60, de Maria Antonieta, la producción que dio a conocer la cineasta. La banda sonora y la partitura de Phoenix se combina perfectamente con las canciones de la época (aunque los propietarios de la música de Elvis no dieron permiso para utilizar sus canciones).

A diferencia de la alienación etérea y suave de Lost in Translation, aquí el aburrimiento corta como una cuchilla. Incluso una ojeada ociosa a una revista de chismes pone a Priscilla cara a cara con la última indiscreción de su esposo, y al mirar a través de las puertas de Graceland siempre hay un férreo grupo de chicas. El severo padre de Elvis, por otro lado, patrulla la mansión como un carcelero. Los amigos están completamente prohibidos. Los de ella, no los de él.

El guion, de Coppola, no ofrece un duro juicio moral sobre el inicio de la relación que, según los estándares modernos, sería un aviso de lo que sucedería después. En cambio, muestra el Elvis posterior como un hombre infantil, errático y controlador que pasa de enfadarse a disculparse, y lleno de caprichos y excesos (pastillas, mujeres, armas, misticismo, amigos molestos) que provocan un enorme desgaste en Priscilla. 

Conclusión

Con tantos biopics que representan a la "mujer detrás del hombre" como víctima, es fantástico ver a uno que recupera el control de la narración. Más empático que juicioso, el drama de relaciones de Coppola hace justicia a la joven heroína. Si hay algo que podemos aprender de la película, es no escoger a un hombre que trate de silenciarte dentro de una jaula de oro, aunque te distraigan sus caderas.

'Priscilla' llega a México desde el 4 de enero.

Calificación: ⭑⭑⭑⭑✩  

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