espiral: El juego del miedo continúa
Foto: Cortesía Twisted Pictures

Espiral: El juego del miedo continúa

La saga de terror SAW vuelve de la mano del comediante Chris Rock

Stivi de Tivi
Escrito por
Stivi de Tivi
Publicidad

⭑✩✩✩✩

Todo empezó con un cortometraje de bajo presupuesto que presentaba a un asesino serial torturando a una persona. La intención del corto era que sirviera como gancho para obtener recursos y producir la película. Las mentes detrás de esto eran James Wan y Leigh Whannell, quienes en 2003 eran desconocidos en Hollywood, pero querían contar historias originales en el cine.

Al año siguiente estrenaron SAW, juego macabro, que fue la sensación en el Festival Sundance de 2004; los críticos la alabaron y de boca en boca hicieron que recaudara $103 millones de dólares con un presupuesto de $1.2 millones. Con esto nació la franquicia SAW, que cada año tenía una nueva entrega y conquistaba la taquilla, pero con el tiempo la magia se fue perdiendo y el público empezó a aburrirse. Así, en 2017 se estrenó la última entrega... O eso creímos. Este fin de semana llega la novena parte, llamada Espiral: El juego del miedo continúa, la cual planea darle nueva sangre y es que la idea nació de la mente del comediante Chris Rock, quien además es productor y protagonista.

El filme sigue al detective Ezekiel Banks (Chris Rock), quien no encaja con sus compañeros de trabajo por lo que le asignan al novato William (Max Minghella), ambos empiezan a investigar los extraños asesinatos a policías que al parecer siguen la misma línea que usaba el terrible (y ahora fallecido) Jigsaw y temen que se trate de un imitador. Lo que no saben es que ellos son la pieza clave en este juego siniestro en el que poco a poco se van muriendo todas la personas a su alrededor. 

Al principio crees que te vas a encontrar con un producto que refrescará esta franquicia tan gastada y los primeros minutos funcionan para atraparnos. Pero conforme el filme sigue avanzado, tanto el ritmo como la acción desaparecen en una constante estira y afloja. De hecho, hay muchos momentos en que olvidas que estás viendo una entrega más de la saga para sentir que observas una parodia de Seven (1995).

Chris Rock es muy buen comediante, pero no tiene nada para estar en el género, porque cada momento de tensión lo rompe con sus caras y reacciones; no puedes evitar sentir que es un chiste. Cuando grita (que lo hace muy seguido) crees que va a salir Adam Sandler para darle una patada en la entre pierna.

Está lejos de mostrar miedo. Se supone que todo este proyecto nació cuando el actor se le acercó al presidente de la productora de la saga, en una boda, para contarle su historia y fue tan maravillosa que decidieron darle luz verde. ¿Cuántas copas se habrán tomado cuando estaban platicando? Porque la realidad es que la película no ofrece nada nuevo, parece una mala copia de lo visto anteriormente y hasta se atreve a poner en la mesa temas actuales que no saben utilizar como la brutalidad y los abusos de poder de la policía contra los civiles, lo mencionan y se les olvida. Y claro, es bastante predecible.

Recordemos que cuando la franquicia salió hace casi 20 años tenía un tipo de tortura visual que resultaba novedoso y fue tan atractivo, que muchas películas del género empezaran a copiarlo: muertes con cortes de edición crudos, movimientos de cámara acelerados y la textura de oscuros sobreexplotados. Pero ahora todo ese estilo se siente viejo, no nos dice nada emocionalmente, solo es observar algo que hasta en videos escolares de YouTube ya saben hacer. La idea era que con Espiral: El juego del miedo continúa, la saga regresará más fuerte que nunca, lo lamentable es que viene sin nada y termina aburriendo hasta la muerte.

Espiral: El juego del miedo continúa Dir. Darren Lynn Bousman. Estados Unidos, 2021. Con Morgan David Jones, Samuel L. Jackson, Chris Rock y Ali Johnson. Estreno: Jueves 13 de mayo.

Recomendado
    También te puede gustar
    También te puede gustar
    Publicidad