Para llevar o para ir comiendo. Por 70 años, ha sido uno de los expendios de dulces más reconocidos de toda la ciudad, o por lo menos por las personas que diariamente circulan por el Centro.
La variedad es muy grande: lunetas, gomitas, bombones y frituras… ¿Quién se resiste a un depósito de dulces? ¡N-a-d-i-e! Quien diga lo contrario, miente.
Este local también funciona como expendio de café de grano, por lo que identificarlos es muy fácil: huele a la distancia.