Sillas Acapulco

Por más de seis décadas, la silla Acapulco ha sido uno de los diseños anónimos más exitosos. Su historia se remonta a los cincuenta, cuando el puerto de Acapulco era el destino playero favorito de varias estrellas de Hollywood. Nadie sabe ni quién ni cuando se inventó; apareció, cual generación espontánea, en las orillas de la playa. Su estructura era perfecta para ese clima, pues el tejido de vinil permitía que el cuerpo no se sofocara.

Después de su popularidad, la silla se empezó a ver en varias playas más. Sin embargo, alguien, un buen día, la sacó de su contexto original y la plantó, sin más, en la sala de su casa. Fue así como se convirtió en el sillón falso más cool.

Actualmente, varios diseñadores se agencian su autenticidad, pero la esencia de la silla no reside en su forma, sino en su practicidad y bajo precio, pues no se trata de un diseño universal.

Salimos en busca de la mejor opción para comprar una y encontramos a Margarito Cano, un comerciante que cada fin de semana ofrece variantes de este tipo de sillas (mecedoras, de palma, para niños, sillones, sillas para barras) en el camellón de Mazatlán y Alfonso Reyes, en la Condesa. Los precios son realmente baratos -y justos, en comparación con algunas tiendas-: 900 pesos por la clásica, una mecedora en 950, las de palma y los sillones en 1,200.

Por supuesto, como en muchos otros lados, puedes escoger el color que quieras; tanto de la estructura metálica como del vinil. Si le das para la gasolina, Margarito lleva las sillas hasta tu casa. 

Sillas Acapulco Mazatlán esq Alfonso Reyes s/n, Condesa. Metro Juanacatlán. 55 1441 8612. Sáb-dom de 12-6pm.