Luis Muñoz
Foto: Alejandra Carbajal

Entrevista con Luis Muñoz

El catedrático preparó un libro de ensayos en el que cuestiona el significado de la tolerancia

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Desde la demanda activista hasta la postura liberal de los bugas, el concepto de la tolerancia se ha convertido en un lugar común dentro del vocabulario de la comunidad LGBTTTI, pero ¿lo usamos de manera adecuada? El catedrático Luis Muñoz Oliveira preparó La fragilidad del campamento, un libro de ensayos que plantea el significado de esa palabra en una democracia que intenta presumir de progresista.

¿Consideras que la sociedad mexicana entiende el concepto de la tolerancia?
Se usa de manera despectiva, como si significara aguantar al otro con la nariz tapada, con asco. También se le ocupa como sinónimo de indiferencia: "me da igual lo que hagas". El problema con esto, que yo llamo falsa tolerancia, es que deja pasar cosas que son inaceptables, como la violencia intrafamiliar. En general la sociedad mexicana no tiene la virtud de ser tolerante.

Es casi automático asociar la tolerancia con la cultura lésbico-gay, ¿qué opinas?

Las personas tienen distintas ideas de lo que quieren hacer con su vida en el aspecto profesional, religioso y sexual. El problema es cuando una forma de ver el mundo se plantea como la única y desde ahí descalifica, y aún peor, persigue a las otras. La tolerancia surge para terminar con los acosos, por eso la asociación entre el concepto y la cultura lésbico-gay es evidente. Esta comunidad ha sido perseguida y denostada. Es tiempo de que termine la inquisición.

¿Crees que los discursos actuales LGBTTTI usan la palabra tolerancia como un lugar común?
Sucede lo mismo que con la sociedad en general, la entienden de muchas maneras, generalmente peyorativas, no como virtud ni como una forma de actuar. Mi libro defiende ese acercamiento.

¿La tolerancia evoluciona al tiempo que avanzan los derechos de la comunidad gay?
Los conceptos evolucionan y la tolerancia también lo ha hecho, primero era religiosa, es decir, respetar al que tiene un credo distinto; hoy, tolerar implica aguantar lo que no te gusta de aquel distinto, pero hacerlo después de los prejuicios. Los prejuicios no se toleran, se superan.

¿Por qué la comunidad LGBTTTI debería leer tu libro?
La democracia es un campamento frágil y la tolerancia es uno de los instrumentos para fortalecer nuestras libertades. La comunidad puede hallar en estos ensayos algunas razones para exigir tolerancia y para practicarla. Todos tenemos derecho a ser como queremos ser, siempre que no dañemos los intereses primordiales a los demás.

La fragilidad del campamento. Un ensayo sobre el papel de la tolerancia
Luis Muñoz Oliveira
Almadía, 2013

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