El inicio de la banda se remonta a 2002. En ese momento si bien el rock tenía una presencia fuerte, estaba explorando nuevas facetas como el nu metal. Pero nada comparado con el golpe sobre la mesa que dió APTBS cuando en 2006 publicó sus primeros tres EPs; Red, Blue y Green. Su sonido era mezcla pesada y atmosférica con influencia del rock psicodélico, el shoegaze y sobre todo, el post punk. Ellos llegaron como una reminiscencia de la oscuridad de bandas de los años ochenta. Algo que nos urgía traer de vuelta. Tan fuerte fue el estallido, que con una corta trayectoria, APTBS llegó a compartir escenario con The Jesus and Mary Chain. En esta etapa, la prensa comenzó a identificarlos como la banda más ruidosa de la escena.
Su primer contrato con una disquera estuvo acompañado de una de esas muchas historias bizarras que comparten los grandes artistas. La firma con Killer Pimp Records fue en una… ¿servilleta? El disco homónimo fue lanzado en 2007 e incluyó temas como “I Know I’ll See You”. Los gritos del vocalista Oliver Ackermann llegaron a los oídos de otra figura que también gustaba de la música ruidosa y de quebrar instrumentos arriba del escenario, Trent Reznor, el vocalista de Nine Inch Nails. En 2008 A Place To Bury Strangers se sumó a la gira de la banda de rock industrial por Estados Unidos.
Su segundo álbum, Exploding Head, se publicó en 2009. Y en 2012 llegó el tercero, Worship. Con un sonido que sin dejar de ser sumamente estruendoso, se volvió más complejo y espacial. Y es que hacer canciones noise no son sólo guitarrazos; APTBS se caracteriza por crear de forma análoga sus propios efectos de guitarra y voz.
Un año más tarde, en 2013, la banda comenzó a grabar su cuarto disco, Transfixiation. Durante la grabación en los Estudios ABC se acompañaron de Emil Nikolaisen de la banda de rock noruega, Serena-Maneesh. Este material fue lanzado en 2015.
En 2018 llegó Pinned, su quinto disco. O una máquina de lavar cerebros, como ellos lo definen. Basta con reproducir “Never Coming Back”, el tema que abre el álbum, para entender a qué se refiere dicha analogía. El material es hipnotizante, sin acercarse mínimamente a géneros como el dream. Es como una máquina, pesada y un poco descuidada, que nos pone entre rejas.
Este 2022 APTBS regresó con See Through You, la dosis de alboroto y griterío que necesitábamos después de años de distanciamiento. Y es que, como dijera la banda en su canción “Let 's See Each Other”, ahora tenemos la oportunidad de estar juntos.
A Place To Bury Strangers se presentará en la Ciudad de México el próximo 21 de julio en el Circo Volador. Una cita con Oliver Ackermann, John Fedowitz y Sandra Fedowitz que promete volarnos los tímpanos.
Recomendado: Conciertos en julio 2022 en la CDMX.