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[title]Se escribe DIIV pero se pronuncia “Dive”. Su nombre está influenciado en la canción homónima de Nirvana y en la astrología, porque todos los integrantes de la banda son signos de agua –y dive en inglés es bucear–. Eso, en gran medida, concentra su esencia. Medio psicodélica, medio alternativa. Se formaron en 2011 en Brooklyn, Nueva York y debutaron en 2012 con Oshin. Disco en el que aparecen algunas de sus canciones más populares, “Doused” y “How Long Have You Known”.
Después de cuatro años, DIIV estará de vuelta en la Ciudad de México para presentarse el 22 de abril en Quarry Studios. La banda está muy emocionada: “Hay una energía específica y única en la audiencia mexicana. Cualquiera que haya estado aquí te dirá que es una de las mejores ciudades en el planeta”, comentan. Este 2022 se conmemoran 10 años del lanzamiento de su primer disco y aunque aún no definen cuál será el setlist de su próximo concierto en CDMX, confiesan que sí habrá algunas sorpresas para festejar el aniversario.
Los neoyorquinos, así como todos nosotros, necesitamos regresar a la música en vivo. Porque con la pandemia –evidentemente– la banda no pudo salir de tour. Aunque no todo estuvo tan mal, porque escribieron nueva música. “Hicimos varias cosas para no dejar de estar metidos en esto: grabamos sesiones en vivo y un montón de canciones. Fue un buen recordatorio de las raíces de la banda, que siempre ha tenido este lado DIY. En términos de creatividad, fue una gran experiencia”, agregan con un cierto aire de esperanza después del encierro. Entonces, la buena noticia es que habrá nuevo disco de DIIV, pero la mala es que no será este año: “Apenas lo vamos a grabar, no hemos entrado al estudio. Por la misma situación hemos tenido varios retrasos. Si las circunstancias fueran otras, seguramente ya estaría listo”.
Una trampa creativa en la que es muy fácil caer es pensar que evolucionar significa rechazar el pasado. Y eso les pasó. En las nuevas composiciones quisieron darle la vuelta a su sonido pero cayeron en cuenta que los fans no hacen eso. Entonces fue importante para ellos recordar su esencia y tratar de hacer música que representara eso, lejos de intentar conceptos nuevos que no se alinearan con su sonido. “Ahora la mayor influencia somos nosotros mismos. Antes cuando hacíamos un disco armábamos una playlist con diferentes canciones que escuchábamos en ese momento y decíamos: oh, esta parte es muy buena. Esta vez tratamos de hacer una representación holística de la banda. No fue como: queremos sonar a Joy Division”, comparten entre risas.
Su último disco, Deceiver (2019) fue producido por Sonny Diperri, quien ha trabajado también con Animal Collective, Portugal. The Man y The Drums. Además de ser ingeniero de audio de Trent Reznor, My Bloody Valentine y M83. Para el material venidero no regresarán al estudio con él, pero no descartan la posibilidad de hacerlo en algún otro momento. “En esta ocasión vamos a trabajar con Chris Coady. Y amamos mucho a Sonny, es un buen amigo, pero parte de lo que es DIIV como banda es la evolución entre discos. Cambios en el proceso, en la manera de escribir y de grabar. Entonces, pensamos que sería interesante probar una perspectiva fresca en la mezcla”, nos adelantan sobre su próxima placa.
Además de la grabación del disco, la banda finaliza la conversación diciendo que su prioridad es salir de tour. Y la CDMX, obviamente, es una de las paradas que más ilusión les genera.