Cubierto por el cielo nocturno, nuestro héroe se halla en una batalla consigo mismo, pues Simba no sabe qué es lo que debe hacer; sin embargo surge de la noche estrellada el rostro de su padre, es el espíritu de Mufasa. Esta escena del musical El rey león, junto con sus personajes y muchas sorpresas más, es lo que verás en la exposición itinerante El rugido del arte.
Más que un estallido, esta muestra es un impresionante rugido de colores, formas, recuerdos y emociones evocadas por cinco máscaras monumentales inspiradas en la usada por el personaje de Mufasa, y que también es el logotipo del exitoso musical.
Cada pieza fue hecha por distintos artistas urbanos de México, cuyo trabajo se ha expuesto en galerías y museos. Ellos son: Bili Bala, Trasher, Fher Val, Paula Victoria y el colectivo Metzican.
Para esta muestra, Bili Bala, creó la pieza llamada "Tótems escondidos", en ella utiliza un fondo basado en el bello atardecer africano que vemos a lo largo de la trama, acompañado de estampados de animales como cebras y jirafas. Además en la pintura podrás ver a los siete personajes del cuento convertidos en tótems: Simba, Mufasa, Scar, Timón, Pumba, Rafiki y Nala.
La representación del mal, así es como ve Trasher a Scar, el león oscuro, tío de Simba, hermano de Mufasa y líder de las hienas, que también es el personaje favorito del artista e inspiración de la pieza "Versus". En esta máscara se aprecia la escena final del musical, la batalla entre Scar y Simba, es la que los leones se encuentran cara a cara preparándose para atacar.
Paula Victoria tituló a su obra "Asha", vida en swahili (lengua africana), pues engloba toda la diversidad y riqueza que tiene la cultura africana. En su trabajo, Paula coloca patrones textiles, motivos florales, los colores del paisaje africano y parte del vestuario que ocupan los actores del musical.
Si tú o tus pequeños son fans de El rey león, ya sea del musical o la película, no pueden perderse esta exposición itinerante. El rugido del arte permanecerá hasta el lunes 7 de agosto en el camellón Álvaro Obregón, frente a Casa Lamm, en la Roma.