Los lunes, miércoles y viernes se encienden los hornos, así que contempla hacer tu pedido con al menos uno o dos días de anticipación, para que lo tengas listo y fresco, o calientito. La modalidad de Semillas al Pan es entregarte tu pedido en su central de la Obrera o con servicio a domicilio.
Todos los productos son de origen local y orgánico, con un cuidado especial en la calidad para que el producto final sea el mismo siempre. Eso sí, todo depende de las temporadas, así que no esperes encontrar lo mismo todo el año. Salomón Flores, Asdrubal y Daniel Torres son quienes están detrás de este proyecto nutritivo, que lucha día con día contra la mala alimentación y los productos dañinamente industriales.
La tirada es básicamente panadería. Están los panes salados con jitomate y albahaca, champiñones con chiles cuaresmeños o zanahorias con espinacas; también los dulces con chispas de chocolate, higos cristalizados o unos roles de canela con pasas, muy recientes en su línea de productos. Ya no compres baguettes o barras de pan mal hechas y caras en cualquier sitio, encárgales una de ajo o una multigrano y sabrás de lo que hablamos.
Otra de sus especialidades son las pizzetas —pan integral— con la intención de favorecer a la comunidad vegana al hacerlas con un queso de papa. La mejor es la mediterránea con champiñones, espinacas y chile morrón, y si la quieres con queso, le ponen manchego de un productor de Xochimilco, el mismo que durante los meses de agosto y septiembre les provee de huitlacoche fresco para una pizzeta especial.
Aquí no acaba la cosa. Puedes solicitar que te envíen por correo una comanda en la que ordenas productos orgánicos y frescos para tu casa, a través de una cooperativa de consumo llamada La Imposible; esta es tu mejor opción como vegano o como consumidor de productos libres de agroquímicos, de consumo local y de comercio justo.