Directamente de la pluma de Tim Crouch, considerado uno de los mejores exponentes del teatro experimental británico, llega a nuestro país su obra más emblemática: El autor, puesta que iba estrenarse justo ante de que el COVID-19 nos confinara.
Ahora, más de seis meses después, El autor encuentra su lugar en el Círculo Teatral de la Condesa, y lo hace en un teatro a cielo abierto debido a que fue demolido al resultar afectado por el temblor del 19 de septiembre de 2017.
Aprovechando cada circunstancia que rodea esta obra, el director Benjamín Cann construye un pequeño, íntimo y poderosísimo montaje acerca de la verdad escénica; es decir, de hasta qué punto lo que estás viendo en un escenario puede, debajo de él, ser o no real.
Es una obra que sucede dentro de la audiencia, entre el público. Como si se tratara de un documental, un actor, una actriz, un fanático del teatro y un autor comienzan —prácticamente de la nada— a contarnos el proceso de una obra de teatro que se hizo hace un tiempo. Al parecer, el montaje provocó revuelo por ser tachado de sensacionalista, y ese es el detonante para que cada uno de los personajes que están ahí sentados entre el público, narren su experiencia de cómo fue abordar algo que hasta el momento desconocían: el instinto más bajo de la condición humana.
El experimento que ejercen tanto dramaturgo como director es a veces provocador, a veces incomodo, pero siempre, muy atractivo. Esto se logra de manera acertada gracias a la narrativa inteligente ejercida por los actores Alberto Estrella, Carmen Madrid, Emilio Guerrero y Miguel Santa Rita quienes, con precisión, entran en una convención de un montaje sin acción real pero que apela al dramatismo de su texto hasta las últimas consecuencias.
Esto comprueba que cuatro actores sentados en una silla con sana distancia, a luz general, en un espacio abierto, pueden ser suficientes para contar una ficción llena de contrastes de una manera fresca.
Beneficiada por todas las circunstancias que lo rodean, que bien podrían jugarle en contra, El Autor, es sin duda, una de las experiencia teatrales diseñadas con sana distancia más contundente de la temporada.
