El mito de Medea es tan rico en significados que puede ser abordado desde diversas aristas. En la obra teatral Éxtasis Medea no solo se ve a princesa y sacerdotisa desde una nueva mirada, si no que se reinterpreta la historia y su relación con Creúsa, por quien siente cierta empatía, pero a la vez desdén. Hablamos con su directora y dramaturga Ximena Escalante, estudiosa de la mitología griega, para que nos cuente por qué eligió a este personaje y qué nos resultará tan interesante de esta obra.
El mito más conocido de Medea
Si no la conoces, en el mito más popularizado de Medea, ella es el arquetipo de bruja o hechicera, y comparte con Calipso y Circe su condición de mujer autónoma e inusual, contraria al prototipo ideal de la época. Era hija del Rey Eetes de Cólquida y se casó con Jasón pero su tragedia se centra en buena medida en que mató a sus dos hijos. Otro personaje importante es Creúsa, ella era hija del Rey Creonte, con quien Jasón pactó para que abandonara a Medea y le diera a su hija.
El verdadero mito Original
Pero este mito no siempre fue así, como nos cuenta Ximena “En el mito original, Medea no mató a sus hijos, al contrario, ella era una sacerdotisa de Hera encargada de recoger niños sanos y felices y entregarlos así. Evidentemente, siempre que hay que acusar a alguien, se le acusa en su punto más débil, y el punto débil de Medea son los niños y por eso se le acusó de asesinar de niños, a sus hijos”.
Lo que la obra aborda
Fue así que indagando más, a Ximena le interesó retomar esta idea y darle una vuelta, mostrar a una Medea que no asesina a sus hijos, pero sí enseñarla en sus complejidades, como nos comenta: “Eso no quiere decir que no sea una bruja implacable, vengadora que es capaz de hacer muchísimas cosas terribles y espantosas. Sí, es criminal, sí, es asesina, sí es tremenda y no se toca el corazón para hacer cosas terribles… excepto a sus hijos. Mi obra tiene esa mirada”.
Medea y Creúsa
Un personaje que quizá es algo olvidado cuando se habla de Medea es la segunda esposa de Jasón, Creúsa. Y es que Jasón hace un pacto con el Rey Creonte para que expulsen a la sacerdotisa de Corinto y el héroe griego se quede con Creúsa. Para Ximena, ambas tienen muchas cosas en común, al grado de que para ella ambas representan la misma mujer, pero en distintos puntos de su vida: “Los personajes están internamente divididos, aquí vemos una doble dualidad, la Medea asesina, implacable, tremenda, pero que al mismo tiempo se conmueve y se identifica con Creúsa, porque creo, es como si fuera la misma Medea unos años antes. Creúsa al mismo tiempo admira la belleza de Medea, su fortaleza, quiere ser como ella. Las dos son princesas, las dos han sido usadas por los hombres en el poder, las dos son usadas y luego desechadas […] La obra las muestra como dos mujeres que aparentemente son rivales, pero en realidad son la misma mujer. Las dos caras de una misma moneda”.
¿Dónde y cuándo verla?
Es protagonizada por Carolina Politi y Ximena Rubio, llega al Teatro Milán a partir del 4 de agosto y hasta el 10 de septiembre. Estará los viernes a las 8pm, sábado a las 7pm y domingos a las 6pm.
Esta pieza teatral buscará retarnos, hacernos pensar y disfrutar un gran rato. Si te gusta la mitología griega, sin duda esto es para ti.
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