¿Quién está detrás de esta obra?
Creado por José Manuel López Velarde, y en el elenco están jóvenes promesas del teatro musical, incluyendo a Alain Peñaloza, Ana Sofía Cordero, Andrea Álvarez, Ángel Enciso, Desireé Medina, Diego Gary, Farah Justiniani, Ilay Perales, Jonathan Portillo, Kike Cosío, María José Brunet, María Guzmán, Mateo Ramírez, Mauro Aldair, Miranda Labardini, Osobampo, Paty Cruz, Paula Anaya Vargas, Sam Sezibwa y Vanessa Bravo.
Un breve resumen
Con La vida es mejor cantando López Velarde busca apelar a los fans de Mentiras pero también a las nuevas generaciones y a toda la familia con esta nueva historia, sin embargo, como todas las ideas, no siempre sale como queremos a la primera.
Empezando por el género, la obra es un musical, por lo que el drama y la comedia son esenciales, pero la ciencia ficción y la magia también tienen cabida al mismo tiempo.
La obra inicia en la actualidad donde conocemos a Chispita, cuyo trasfondo es que es huérfana y está becada, y a Micky quien quiere ser estrella de rock (los supuestos protagonistas), también a sus compañeros de escuela, y tambiién a Miss Dulce, quien presenta un cabello canoso. Entre el alumnado más destacable nos presentan a una niña fresa, una niña "que le sabe" a la tecnología, un chico de baja estatura que es temeroso pero quiere ser manager y le gusta Micky, y se da a entender que hay un personaje no binarie, pero solo se deduce por su vestuario y porque menciona que ya no se llama como antes.
En una fiesta en la casa de Micky, un gato que se llama "El Gato", que siempre ha acompañado a Chispita les revela que puede hablar y ayuda a los niños que lo necesitan (¿En qué los ayuda? Quien sabe), entonces con un tocadiscos los transporta a la década de los ochenta donde conoceremos a los verdaderos protagonistas, una versión ficticia de los integrantes del original Timbiriche (Sasha, Benny, Mariana, Diego, Alix y Paulina), que también fueron alumnos de Dulce, y están preparándose para un concurso de talentos pero un cuadrado amoroso, los problemas de pre adolescentes y hasta de clases sociales harán que esta meta se vea complicada y poga a prueba su amistad, (spoiler) más tarde descubrimos que son los papás de los niños que conocimos al inicio.
¿Qué nos pareció?
Resumir la obra es escencial para entender que tiene problemas desde la dramaturgia; Velarde comenta que la escribió justo después de Mentiras, pero da a notar que fue un momento en el que era muy fan de Timbiriche, pues todo el tiempo tenemos canción tras canción y pareciera que los diálogos están escritos para tratar de abarcar todas las canciones posibles, en este sentido, en Mentiras las referencias a los ochentas son sutiles o no es necesario conocerlas porque son guiños, a un carro, una revista o una telenovela, cosas banales, pero en esta ocasión las referencias son parte de la mayoría de los chistes, cosa que los más jóvenes obviamente no van a captar.
En el caso de los personajes, los de la actualidad son estereotipos muy marcados, los del pasado funcionan mejor porque tienen un desarrollo más elaborado, pero se enfocan tanto en unos que otros se quedan flojos, como Chispita, Ricky y El Gato, que solo están ahí existiendo todo el tiempo porque son meros espectadores y hasta se te olvida que están ahí, Dulce es Dulce porque se parece a Dulce y hace referencias a Mentiras, pero en realidad pudo haber sido cualquier maestra y no habría diferencia, Alix y Paulina quedan fuera del problema amoroso y su única función es tratar de juntar el grupo, y aunque tienen uno de los mejores números de todo el músical, se sienten apartadas de la trama como "¿Qué hacemos con ellas?".
Hay temas que tratan de tocar, pero no se sienten orgánicos, en especial el machismo o el medio ambiente, uno que se siente más como un comentario del autor y otro está meramente para que entre una canción.
La música y las canciones son completamente de la primera etapa de Timbiriche, por lo que solo cierto sector lo pasará muy bien recordando y cantando estos primeros éxitos, pero al público general o las juventudes que conocen las canciones más populares que salieron en las siguientes etapas o cuando los integrantes eran más grandes, como cuando estaban Erick Rubín y Thalía (por ejemplo), les tocará descubrir canciones que hablan sobre la amistad y la niñez.
En el elenco hay intérpretes muy talentosos con voces muy bonitas y capacidades actorales y dancísticas destacables, son nombres nuevos y frescos, algo que ya hacía falta en los escenarios mexicanos, y por supuesto que en su mayoría tendrán un futuro prometedor, el desempeño del elenco carga completamente con la obra.
En cuanto a la producción, al presentarse en la "casa" de Mentiras, el musical y ser de los mismos productores y creatvos, veremos en escencia las mismas estructuras de luces que se usan para esta y una escenografía de cubos de colores funcionales para contar esta historia, el juego de luces es muy acertado, aunque en cuestiones de sonido, los bajos hacen que se sienta encapsulado y las voces quedan opacadas.
Si bien es una propuesta interesante, pareciera que no es el mejor acierto de José Manuel López Velarde, a diferencia de la aclamada "Si nos dejan", la bella "El último Teatro del Mundo" y sobre todo "Mentiras" que (a pesar de las dificultades) lleva más de 10 años en cartelera y ha encontrado un lugar en el corazón de los teatreros mexicanos, "La vida es mejor cantando" tiene potencial, pero se queda a medias en unos aspectos y sale sobrada en otros, es una gran apuesta, y el público es quien tendrá la última palabra, desde nuestra perspectiva apunta más a que sea el mismo público que Mentiras, porque para las nuevas generaciones la experiencia dejará muchas dudas y esto solo tendrá dos resultados posibles: o tendrán emoción por concer más de la agrupación y preguntarán a los mayores sobre la época generando conversación, o no entenderán nada, se aburrirán y no la disfrutarán.
Boletos
Los boletos ya están a la venta en ticketmaster con costos desde $440 hasta $2,257. Estará en el Teatro Aldama los sábados y domingos en horarios de 11am y 1:30pm.
Recomendación: ¿Cómo ver teatro de calidad con $30?