Se dice que la melancolía es el conjunto de malestares que caracterizan un dolor inexplicable acompañado de aislamiento, pérdida de interés, desgano y pensamientos con la muerte. Sin embargo, también funciona como método de reflexión tanto filosófica como religiosa y una posibilidad de entablar conversaciones personales para centrarse en uno mismo.
Bajo esta premisa surge Melancolía, exposición bajo la curaduría del especialista en arte novohispano, Abraham Villavicencio. Miembro fundador del seminario Creencias y prácticas religiosas novohispanas. Escatología y mística y también profesor de los cursos de arte moderno europeo.
La muestra está compuesta por cuatro núcleos de estudio que son La pérdida del paraíso, donde se reflexiona sobre el pecado original y los sentimientos primitivos. Con piezas como Después de la tormenta, de Diego Rivera.
En La noche del alma, aborda la pérdida del amor, de los hijos y la orfandad. Con obras como la serie de litografía de Juan Soriano sobre el suicidio con poemas de Sergio Pitol y Retrato de Sofía, de Julio Galán.
El tercer módulo pertenece a La sombra de la muerte con pinturas de Juan Tinoco, Roberto Montenegro sin olvidar Muerte y resurrección, de José Clemente Orozco.
Por último, encontrarás Los hijos de Saturno donde sobresale Pierrot el loco, de Julio Ruelas y El iluminado, de Rufino Tamayo.
En total son 137 piezas pertenecientes al acervo del Instituto de Bellas Artes y del Museo Nacional de Arte de 80 artistas de la plástica mexicana, del periodo novohispano hasta la actualidad.
Para no perderte la oportunidad, el museo extenderá el horario a partir del 6 hasta el 8 de julio de 10am-8pm, con entrada gratuita de 6-8pm.