Baghead: contacto con la muerte

Iris (Freya Allan) hereda un bar en Berlín tras la muerte de su padre. Pero la herencia guarda un oscuro secreto: en el sótano, una criatura puede tomar la forma de personas fallecidas. La gente paga por hablar con sus seres queridos, pero jugar con la muerte nunca es buena idea. Esta es la trama de Baghead: contacto con la muerte, película de terror inglesa que llega esta semana a la cartelera mexicana. Es dirigida por el español Alejandro corredor.

Tuvimos la oportunidad de platicar con el realizador y con la actriz Freya Allan, quien está por convertirse en la actriz más buscada en Hollywood por su participación en la nueva trilogía de Planet of the Apes.

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Generalmente las películas de terror nos muestran a la muerte como una amenaza a los humanos, pero aquí son los humanos los que utilizan a la muerte, ¿Por qué hacer este cambio?

Alejandro Corredor: tenía ganas de mostrar los dos lados de la moneda, por un lado están los humanos tratando de controlar a lo que le temen y es una de las grandes partes de la película y por eso es que el mal es prisionero en ese lugar. Pero al final del día es todo lo que las personas solemos hacer, siempre creemos que tenemos el control cuando realmente no es así. Entonces, cuando te tienes que enfrentar a una entidad que ha estado en el mundo por cuatrocientos años al final del día tú no eres la persona encargada. Esa para mí es la idea principal de la historia de esta bruja.

¿Cómo fue crear estas reglas?, ¿cómo tienen que ser dos minutos?, ¿cómo fue crear todo?

Alejandro Corredor: cuando te enfrentas a las películas de terror existe algo llamado mitología, que es algo grande cuando estás generando la historia. Ya habíamos producido esa mitología de los dos minutos o que necesitas un objeto para que la bruja pueda traer de regreso a la persona que deseas. Todo esto lo pensamos siempre como que es lo que le ofrece a la historia y la regla más importante para mí siempre fue que existieran esos dos minutos porque crea una adicción, porque siempre quieres regresar a esa bruja cualquier cosa que necesites resolver de tu pasado o hablar con alguien que ya murió no vas a poder hacerlo en dos minutos, vas a querer siempre regresar y eso es lo que le da motivación a estos personajes y a esta bruja, se meten en tu cabeza y te hace tener que cumplir sus deseos.

Freya, cuando estaba viendo la película me surgió esta duda, ¿Cómo es interpretar a un personaje que termina siendo poseído? Eres un personaje, pero a la vez eres alguien poseído. ¿Cómo es ser dos personas en una?

Freya Allan: esto ya lo he hecho antes, lo creas o no. Lo hice en “The Witcher”, entonces ya soy una profesional para ser poseída, no, pero si he tenido una reflexión sobre el hecho de estar poseída porque una amiga se graba el otro día y dije, se me antoja estar poseída para poder ser algo totalmente diferente, pero bueno, en verdad que fue algo divertido. Me gustó. Cuando estás poseída, eres esa criatura o persona que te posee, dejas de vivir en el cuerpo de ser tú, entonces ya no tienes la presión de ser dos personajes porque solo hay uno ahí adentro. Eres Baghead.

¿Recuerdas la primera vez que viste a Baghead? ¿El personaje ya con la máscara?

Freya Allan: sí, claro que recuerdo. Estábamos en el estudio, en el set donde el sótano se construyó. Tengo que admitir que tuvimos una par de risas, esa risa nerviosa. Las personas siempre creen que filmar una película de terror es una experiencia demoniaca y no, a veces puede ser más divertida que tétrica. Cuando empezamos a filmar todo fue un poquito intenso, sobre todo en las escenas en la que la criatura se me acercaba más. Ese momento me dieron ganas de querer huir.

Alejandro Corredor: eso ayuda a crear también un momento cuando estás frente a alguien porque, aunque estemos en este negocio, al final eres un humano y si te topas con algo parecido no sabes realmente como lidiar con eso. Entonces en este caso nos daba risa y todos sabemos que es muy difícil estar en esa posición y lograr manejar los sentimientos. Eso es lo que pueden hacer solo buenos actores. Romper esa barrera y estar en ese momento.

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