Hablamos con Rose Glass, la directora del thriller Amor, Mentiras y Sangre
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Hablamos con Rose Glass, la directora del thriller Amor, Mentiras y Sangre

Amor, Mentiras y Sangre es un thriller pop con amor y surrealismo. Tan interesante como sus temas, es lo que no dijo su directora Rose Glass.

Stivi de Tivi
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Stivi de Tivi
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Rose Glass ha ganado reconocimiento gracias a su ópera prima Saint Maud por la que en 2019 recibió elogios al explorar los temas religiosos y psicológicos entregando una terrorífica experiencia audiovisual. Ahora Glass regresa con su segundo largometraje el cual dio mucho de qué hablar en la edición de Sundance de este año. Amor, Mentiras y Sangre es protagonizada por Kristen Stewart y Katy O’Brian, quienes interpretan a una pareja que se conoce en un pueblo rural de Nevada. Lou (Stewart) es dueña de un gimnasio y Jackie (Katy) es una fisicoculturista en camino a una competencia en Las Vegas, la atracción entre ambas es inmediata pero se desatará un caos casi sobrenatural alrededor de ellas. Es por esto que platicamos con la realizadora queer sobre los retos e inspiración que tuvo.

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El nombre de A24 significa mucho actualmente en la industria cinematográfica mundial, ¿Cómo te sientes que ellos produzcan tu segundo largometraje?

Para serte honesta, fui increíblemente afortunada de que esta cinta se haya producido, sentí mucho apoyo y entusiasmo de A24, que financia esto junto con Film4 de Reino Unido, ellos fueron los que me produjeron mi película pasada. Los de A24 se me acercaron y me dijeron: ¿Qué deseas hacer después? Y yo ya tenía esta idea, se las presento y ellos: genial, ok, hagámosla. Eso me motivó porque con apoyo de ese tipo haces todo mucho más sencillo, y es que cuando quieres hacer algo tan arriesgado sabes que todos dirán que no. Esta es la película que quería hacer desde el principio.

¿Qué te inspiró a escribir un guión tan fuera de lo común?

La idea fue evolucionando, justo en la post producción de Saint Maud porque estaba pensando en qué hacer después y sabía que quería hacer algo divertido y con algo de violencia. Ahí pensé que una mujer fisicoculturista sería bastante interesante porque me parece un mundo fascinante, esa entrega total que afecta psicológicamente y que visualmente puede ser aterrador. Cuando se estrenó Saint Maud, la gente aplaudió que fuera un personaje femenino fuerte y eso también me motivó.

¿Cómo fue que decidiste tener este tono tan particular de la película?

Desde que empecé a escribir con mi coguionista Weronika Tofilska sabíamos que queríamos un thriller pop que mezclara el amor con surrealismo, esto es algo que es muy cercano a mi porque mis cortometrajes cuentan con estos elementos, pero cuando la estas escribiendo, filmando y editando va tomando otro camino. Creo que el tono se da por la colaboración de todos los departamentos. Es raro porque debes de crear en tus instintos, pero a la vez ceder un poco sin dejar que el tren se salga de la vías.

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