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[title]En conjunto con algunas organizaciones no gubernamentales y familias LGBTTTI, la abogada y música Aleh Ordoñez concretó en 2015 el primer reconocimiento de hijos para familias homoparentales y lesbomaternales en la Ciudad de México.
En 2016 fundó LEDESER, Litigio Estratégico en Derechos Sexuales y Reproductivos, A.C. que vela por los derechos de las mujeres para decidir sobre su cuerpo. También participó en la iniciativa de reforma constitucional sobre Orientación Sexual e Identidad de Género para el Senado. Uno de los logros más importantes que ha conseguido es la expedición del primer pasaporte en favor de una familia lesbomaternal por la Secretaría de Relaciones Exteriores. Un logro básico para algunos, pero que se pensaba imposible.
Al preguntarle dónde están las lesbianas, Aleh comenta: “como movimiento político de la diversidad sexual es importante pensar dónde estamos las mujeres en la vida pública y qué estereotipos soportamos que nos mantienen en el anonimato, a lo que se suma el color de piel, la instrucción educativa, la clase social y otros factores. Las lesbianas luchamos contra la discriminación en nuestros supuestos entornos de seguridad, como el familiar, el laboral y el escolar. También combatimos la desigualdad social, laboral, jurídica y económica basada en el género”.
Foto: Loops Sandoval
Ella conoce bien al sistema patriarcal y heteronormado que nos rige y que controla nuestros cuerpos, espacios, relaciones y hasta nuestra reproducción, lo que entorpece la visibilidad: “Entre tantas violencias y batallas cotidianas es muy difícil encontrarnos y reconocernos, no es fácil salir y nombrarse pero la invisibilidad nos sale más cara; y es que incluso nuestros estereotipos nos orillan al clóset. Es importante hablar con las otras para saber lo que necesitan, acompañar sus luchas, apoyar y mirar hacia el futuro”, puntualiza Aleh.
En un pronunciamiento en la pasada Marcha del Orgullo LGBTTTI con voz fuerte dijo: “hoy vamos a recorrer estas calles para invitar también a quienes no lo han hecho por un miedo legítimo y para decirles allá afuera que no están solos y que el movimiento LGBT es más fuerte y no se detendrá jamás”. Su discurso emocionó al público.
Foto: Loops Sandoval