Sexy Zebras vuelve a la carga con "Marisol", un himno de desamor que no se revuelca en la tristeza, sino que la transforma en energía. La banda madrileña presenta este nuevo adelanto de su próximo álbum con una declaración de principios: después de la tormenta no solo llega la calma, sino también riffs potentes.
Recomendado: Dónde comprar discos de vinil en la CDMX
La canción es una oda al renacimiento de las emociones, una explosión que sacudde la melancolía. Sexy Zebras mantiene el músculo eléctrico que los ha caracterizado desde sus inicios, pero con una madurez que los lleva a coquetear con influencias diversas. Hay algo de la chulería de Loquillo, un poco de la crudeza poética de Extremoduro y, si se escucha con atención, ecos de las guitarras de The Cure.
El sencillo llega tras "Mañana no existe" y "Días de mierda", consolidando la dirección de este nuevo trabajo, que además marca el inicio de su relación con el sello DRO.
La letra es una de esas que golpean duro: hay nostalgia, pero sin lamento; hay reflexión, pero sin drama. Es el tipo de canción que se grita, recordando que después del amor viene lo que uno quiera que venga, y que perder el miedo es el primer paso para empezar de nuevo.
