A Lucio le gusta ofrecer comida de mercado y de temporada, que aunado a las cervezas artesanales en su haber, convierte a este restaurante en uno de mis favoritos de la Doctores.
Su repertorio incluye platillos que van desde un ceviche de sierra con nopalitos y gajos de mandarina, hasta burritos de marlín y crumbles con higos más frescos que el amanecer (ve la foto).
Si ya te diste una idea de lo que hacen, ahora te platico sobre el menú especial que tendrán para este San Valentín: almeja “bien rasurada”, ensalada de jitomate, clam chowder servido en pan (al estilo cocina cajún), solomillo en salsa caramelizada con cerveza tipo amber (roja), y de postre, un flan de chocolate o un sorbete de mandarina con su toque de mezcal.
No le busques mucho, esta opción te ofrece una zona en pleno desarrollo gastronómico y en un espacio tan aleatorio en su comida (de autor en serio), que el enorme arte huichol en la pared y el biombo oriental me sirven de aval.
Si el menú no te enamoró, seguro que el precio sí. Asegura tu lugar reservando cuanto antes: la cena tiene un costo de 500 pesos e incluye maridaje.