Papalote Museo del Niño

¿Estás conectado con tu cuerpo, el medio ambiente, tu familia, tu hogar y tu ciudad? ¿Cómo puedes lograr que todo esto sea mejor? Con esta idea se desarrollan las experiencias que ofrece el Papalote Museo del Niño, uno de los museos interactivos favoritos para niños en la CDMX, después de una necesaria renovación que les llevó tres años.

Ahora, con un recinto más cómodo y sustentable; además de anunciar la construcción de una sede hermana en Iztapalapa que estará lista a finales de 2018, el museo vuelve con instalaciones más luminosas, una planta para reciclar aguas negras y jardines ecológicos que captan el agua de lluvia para su reutilización.

Además, nuevas zonas te esperan para mostrarte de qué manera los seres humanos estamos interconectados entre sí y con la naturaleza, desde los microorganismos en nuestro cuerpo hasta el medio ambiente en las ciudades y el entorno natural. En estas nuevas salas realizarás un viaje por la vida de manera individual y colectiva, todo mediante un aprendizaje lúdico.

El viaje por el Papaplote Museo del Niño inicia es una experiencia multimedia acerca de la complejidad de la vida y nuestra interconexión. La zona introduce los temas que abarca esta nueva experiencia del Papalote. Mi cuerpo es una navegación por la anatomía humana y su comunidad de microbios, huesos, nervios y músculos que en conjunto trabajan para nuestro bienestar. En México vivo podrás apreciar la biodiversidad de todo el país a través de sus sistemas ecológicos y de qué manera dependemos y nos integramos con estos. Mi hogar y mi familia nos explica la importancia de las redes culturales que nos unen como sociedad. En Mi ciudad, los niños podrán subir a redes, caminar en puentes colgantes y arrastrarse dentro de las alcantarillas; se trata de un viaje por las entrañas de la ciudad.

El Laboratorio de ideas incluye una multitud de materiales y herramientas donde potenciarás tu creatividad para resolver problemas. Dibujar, fabricar e inventar son algunas de las experiencias de esta sección inspirada en el movimiento maker, que fomenta el trabajo colaborativo con un enfoque en las ciencias, tecnología, ingenierías, artes y matemáticas.

El espacio ofrece otra vez su famoso Jueves para Adultos, ideal para aplicar una cita romántica con tu pareja o con tus amigos. Dos jueves al mes el museo abre sus puertas para que te diviertas y experimentes en sus clásicas camas de clavos y burbujas gigantes. Échale ojo a su página oficial porque hay noches temáticas que incluyen preparar cerveza artesanal, crear un objeto gigante de cartón, contender en un torneo de altura, conocer sobre los tatuajes y construir con miles de ladrillos.

El Papalote Museo del Niño concentra experiencias para despertar la imaginación a través de una narrativa que emociona, inspira y cautiva a los más pequeños, por eso es uno de los mejores museos para niños en la CDMX.