¿Conoces el concepto más saludable de Grupo Carolo? Quizás has escuchado de este restaurante por su panadería o por el famoso desayuno los fines de semana, pero Aromas tiene bastantes opciones a la hora de la comida que seguro satisfacen igual a tu primo carnívoro que a tu amiga la vegana estricta. Nos dimos una vuelta por la sucursal de Parque Duraznos pero tienen otra en Monte Everest 770, Lomas de Chapultepec.
Aquí, el espacio abierto, con un interiorismo en tonos marrones a juego con mucho verde natural en la terraza te anima a pedir platos que te hagan sentir bien, con los mejores vegetales y proteínas de buena calidad. Si bien aquí entre el 60 a 70% de los platos no llevan carne roja, si algo le sobra a la cocina de la chef ejecutiva Itzel Muñoz son ideas para hacer platos sabrosos y nutritivos.
Como entrada, compartimos unas tostaditas con el dip de jocoque con tapenade (pasta de aceitunas y hierbas), aceite de oliva y jitomates cherry rostizados. También las coliflores crujientes con limón, sal de jamaica y tahini; éstas nos ganaron por el toque de chile piquín que las realza completamente.
En cuanto al plato fuerte, el favorito fue el pollo en su jugo (cuya salsa concentrada acabamos a cucharadas) el pollo cocido perfectamente nunca se siente seco y el conjunto del plato se eleva con el sazón mediterráneo de los trozos de dátil, cebollitas, alcaparras y alcachofas. Además viene acompañado de arroz jazmín con tropezones de almendra, y perfumado con albahaca y eneldo.
Pero si vas en busca de comfort food, una de las opciones más monchosas que vas a encontrar es el French dip. Su versión es una baguette de la casa rellena de new york sellado, queso manchego y harissa (una pasta de chile de Medio Oriente). Como todo clásico french dip, se chopea en un gravy de jugo de carne y se acompaña de papas a la francesa.
Dejamos el pan de dulce para otro desayuno, porque teníamos que cerrar con un postre que nos enamoró desde el aspecto visual. El milhojas lleva capas de hojaldre, mousse de chocolate y caramelo, balanceado con la frescura de los frutos rojos y una bolita de helado de queso mascarpone.
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