En la Ciudad de México hay muchas opciones para que ellos se relajen y se consientan: desde peluquerías para hacerse un nuevo corte de pelo, barberías con tradición, hasta los mejores spas.
Aquí hay tres peluqueros de donde escoger: Alfredo, Justino o Mario. Estos hermanos inauguraron la peluquería en 2009. Aunque el negocio es relativamente nuevo, ofrecen los mismos servicios de una peluquería antigua.
Como la mayoría de los peluqueros, Lupillo empezó a trabajar de “chícharo” (ayudante de barbero). Desde que tenía 15 años observaba la técnica de su papá y después la practicaba haciendo cortes gratuitos con los clientes de confianza.
Los clientes de Don Julio empiezan desde el bigote de Eduardo Alcaraz (actor conocido por interpretar al mayordomo en Escuela de vagabundos) hasta la cabellera de Rafael Acosta Ángeles, sí, el famoso “Juanito”. Aunque ninguno de estos personajes represente tu estilo, el maestro con 41 años de experiencia no te dejará salir hasta que tu pelo luzca guapo.
Ha sido un negocio familiar por más de 40 años. Ramón Ortiz, el maestro peluquero, heredó el trabajo de su padre. Decidió darle un toque más varonil adornando el interior con fotografías de actores de la época de oro del cine mexicano.
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