10 piezas imperdibles de la exposición Picasso y Rivera. Conversaciones a través del tiempo

Picasso tuvo su etapa azul, provocada por la tristeza del suicidio de su amigo Carlos Casagema. El pintor amigo de Picasso está representado en esta pieza junto a una prostituta.

Vemos una representación surrealista que muestra la fascinación del español ante esta figura mítica, con la cual se sentía identificado.

En esta pieza observamos la cumbre de su periodo clásico, el equilibrio entre lo pasivo y activo representado en dos jóvenes a la orilla del mar.

El color usado en la obra y las perspectivas inusuales de la arquitectura se mezclan en este paisaje. Busca una foto en internet del pueblo francés y lo verás.

Es un dibujo con la técnica de colores pastel en papel barnizado. Esta pieza pertenece a la colección del Museo de Arte del Condado de Los Ángeles (LACMA).

Del muralista mexicano no te puedes perder las obras a caballete de su etapa cubista. Una de las más destacada es el famoso Paisaje zapatista (1915) también conocida como El guerrillero, es una pieza poco ortodoxa por la inclusión de elementos mexicanos y colores brillantes.

Algunos creen que tiene un guiño a la distancia que lo separaba de la Revolución en México al plasmar la palabra francesa patria en el gorro del protagonista.

En esta pieza, Rivera retrató a su amigo Jesús Tito Acevedo con una superposición de capas de pintura que captan la personalidad del personaje.

Utilizó la misma técnica que en El arquitecto con trazos geométricos. También es conocida como Hombre del cigarrillo.

Cierra con los colores y texturas de esta pintura cubista, que llega a México de una colección particular desde Bruselas, Bélgica.