Algunos de nuestros géneros cinematográficos es el terror, thriller, cine de fantasía y ciencia ficción, por lo que el anuncio de la décimo octava edición de Macabro: Festival de Cine de Horror de la Ciudad de México nos pone la piel de gallina de la emoción —bueno, también porque nos da miedo—.
Del 21 de agosto al 1 de septiembre, recintos dedicados al cine como la Cineteca Nacional, Cinematógrafo del Chopo, La casa del cine, Museo Panteón de San Fernando, el circuito de Faros y hasta la Pulquería Los insurgentes, abrirán sus puertas para proyectar las historias más terroríficas del los últimos tiempos.
Esta edición, Macabro presenta un pequeño homenaje al relato El vampiro (1816), de William Polidori, que si bien no fue tan famoso como Drácula de Bram Stoker, es de gran importancia para el desarrollo de este personaje, por lo que se proyectarán cintas dedicadas a vampiros burgueses como La danza de los vampiros (Roman Polanski, 1967), El ansia (Tony Scott, 1983) y Entrevista con el vampiro (Neil Jordan, 1994).
También se presentará el documental Hail Satan? (Penny Lane, 2018) que muestra las dificultades a las que se enfrentaron los seguidores de Satán para fundar su iglesia; The Head Hunter (Jordan Downey, 2018), cinta épica de un guerrero medieval que va tras el monstruo que mató a su familia. Sobresale La llorona, de Ramón Peón, cinta de 1933 encargada de la Gala Macabra.
Además de las proyecciones, la Facultad de Cine (UNAM) recibirá la masterclass del guionista Emilio Portes, la editora Tania Rojas y el realizador Leopoldo Laborde, además del seminario de Carlos Meléndez y Adrián García Bogliano sobre cine y guerrilla para comentar su película Scherzo diabólico.
