La biblioteca central de Ciudad Universitaria
Foto: Mattza Tobón

Guía de Ciudad Universitaria

Desde museos hasta las mejores actividades culturales para disfrutar del campus principal de la UNAM

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Durante los años cuarenta la modernidad y el desarrollo del país eran incontrolables, además de una industrialización que reclamaba materializar un centro arquitectónico que concentrara las principales actividades del proyecto académico y cultural más importante del país: la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). En 1952, Ciudad Universitaria fue inaugurada por el entonces presidente Miguel Alemán y fue hasta 2007 que fue declarada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.

Te invitamos a disfrutar de este referente arquitectónico del siglo XX en México; visita sus museos, como el Museo Universitario de Arte Contemporáneo, disfruta de la vista de sus áreas verdes y aprecia las diferentes expresiones artísticas que se realizan en el Centro Cultural Universitario

Lugares que debes conocer en Ciudad Universitaria

  • Museos y centros culturales
  • Ciudad Universitaria
  • 5 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
MUAC, Museo Universitario de Arte Contemporáneo
MUAC, Museo Universitario de Arte Contemporáneo

El arte había dejado de llamarse moderno en el siglo pasado y hacía falta crear un espacio dedicado en exclusiva a albergar las últimas propuestas artísticas, aquellas que las generaciones más jóvenes estuvieran desarrollando y que ahora, a falta de otro nombre mejor, se denomina arte contemporáneo. Surgió entonces uno de los museos más funcionales y bellos de la oferta museística capitalina. Inaugurado en noviembre de 2008 y con un diseño impresionante de Teodoro González de León, se trata de un espacio multimodal que lo mismo permite la exhibición de obra retrospectiva, que ser espacio de instalaciones ideadas específicamente para este recinto. Respaldado por la Universidad Nacional Autónoma de México y enclavado en la pedregosa área de su Centro Cultural Universitario, complementa la fascinante oferta creativa que esa zona ha regalado a nuestra ciudad con salas de concierto (Sala Nezahualcóyotl y Sala Carlos Chávez), de danza (Sala Miguel Covarrubias), de teatro (Foro Sor Juana Inés de la Cruz, Teatro Juan Ruiz de Alarcón), de cine (Salas Julio Bracho y José Revueltas), una cafetería que ha ganado premios por su exquisita gastronomía (Azul y Oro) y el alucinante espacio escultórico que extiende sus dominios en la reserva ecológica de El Pedregal. Una de las propuestas más interesantes de este museo es El Espacio de Experimentación Sonora: un cuarto obscuro donde se reproducen obras sonoras de todo tipo. Vale la pena informarse acerca de las exposiciones temporales ya que s

  • Museos y centros culturales
  • Ciencia y tecnología
  • Ciudad Universitaria
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Universum, Museo de las Ciencias
Universum, Museo de las Ciencias

La respuesta a precios accesibles al Papalote Museo del Niño es este museo de ciencia en el Campus de Ciudad Universitaria, donde también se vale tocar y divertirse. Por supuesto, padece de los mismos males: un buen porcentaje de sus atracciones ya no sirve más, así que la frustración de oprimir el botón rojo y ver que nada sucede puede ser acumulativa. Sin embargo, su sala de matemáticas es divertidísima, en especial las esculturas de espejos en las que uno se asoma al interior para verse multiplicado en esferas, cubos y pirámides flotantes en 3D, y todo como efecto de la catróptica, es decir, la ciencia que estudia los efectos de los espejos. También tiene amenas exposiciones temporales de todas las ramas de la ciencia, en donde los niños suelen salir fascinados (y esas son las mejores, pues como están recién montadas, todo funciona). Tienen también un pequeño planetario, con una función muy entretenida y un montón de objetos que despiertan tu curiosidad y sacan a jugar al niño que llevas dentro.

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  • Ciudad Universitaria
  • 5 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Es el complejo cultural por excelencia de la UNAM abierto desde 1976. Aunque está dentro de la universidad, los eventos son abiertos a todo público. Se inauguró con la Sala Nezahualcóyotl y con el tiempo se sumaron la Sala Carlos Chávez, el Teatro Juan Ruiz de Alarcón, el Foro Sor Juana Inés de la Cruz, el Centro Universitario de Teatro (CUT), la Sala Miguel Covarrubias, las salas de cine Julio Bracho y José Revueltas, el Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC).  Su programación está a cargo de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM.

  • Qué hacer
  • Ciudad Universitaria
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

El patrimonio cultural de Ciudad Universitaria no sólo sirve para pasear perros los domingos o poner ofrendas en Día de Muertos. La explanada central es, de hecho, más comúnmente usada como una extensión del Estadio Olímpico Universitario, pero con divisiones amateur. El espacio es amplio y puedes jugar sin el temor a que te atropelle un auto. También está la ventaja del tiempo: está abierto las 24 horas, todos los días. Además, ¿no es inspirador jugar entre obras monumentales de Diego Rivera, Juan O’Gorman y David Alfaro Siqueiros? Lo malo es la superficie, que está muy lejos de ser el césped de Wimbledon. De pronto hay hoyos ocultos en el pasto que te pueden causar un esguince de tobillo si no te cuidas.

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  • Música
  • Lugares para escuchar música
  • Ciudad Universitaria

Ubicado dentro del Centro Cultural Universitario al sur de la Ciudad de México, la Sala Nezahualcóyotl es el proyecto arquitectónico diseñado por del mexicano Arcadio Artis y el estadounidense Christopher Jaffe —experto en diseño acústico— y tiene una capacidad para 2,311 espectadores.  La Sala Nezahualcóyotl es la sede de la Orquesta Filarmónica de la UNAM y es considerada entre las mejores salas de conciertos en Latinoamérica. Su historia comenzó en los años setenta cuando el maestro, Eduardo Mata —entonces director de la OFUNAM—, se dio cuenta del crecimiento artístico que había logrado por la orquesta universitaria. Durante los setenta, las salas de conciertos se construían de forma rectangular, pero ya que Christopher se inspiró en la Filarmónica de Berlín y el Concertgebouw de Ámsterdam y diseñó Sala Nezahualcóyotl con forma redonda. En este recinto se han presentado músicos nacionales e internacional como la Orquesta Sinfónica de Londres, la Orquesta Sinfónica de Berlín y de ámbito más popular como La Sonora Santanera con la OFUNAM y Natalia Lafourcade, aunque también hay espectáculos como El Cascanueces.

  • Qué hacer
  • Caminatas y paseos
  • Ciudad Universitaria

Si de reverdecer la ciudad se trata, Ciudad Universitaria tiene varias experiencias para presumir. Una imperdible está en una de sus áreas más recónditas, pero vale la pena la visita. Se trata de la azotea de la Coordinación de Investigación Científica (CIC) de la Universidad Nacional Autónoma de México, que fue intervenida con distintas especies de plantas y 84 paneles fotovoltaicos. Además de refrescar el edificio, capturar diferentes contaminantes y generar oxígeno, la azotea verde también regala calma a los visitantes y una oportunidad única de observación a los de especies de flora a los investigadores. Las plantas medicinales y las especies comestibles que encontrarás son tomatitos y calabazas que roban sonrisas.

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  • Arte
  • Escultura
  • Ciudad Universitaria
  • 5 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Arquitectos: Helen Escobedo, Manuel Felguérez, Mathias Goeritz, Hersúa, Sebastián y Federico Silva, 1979. Ciudad Universitaria es la más grande proeza estilística, artística, arquitectónica y urbanística realizada en nuestro país durante el siglo XX. Nunca habrá una organización pública o privada que equipare los logros culturales dispuestos en las más de 700 hectáreas que conforman su territorio, esto a pesar de los muchos conflictos académicos, políticos u organizacionales por los que atraviesa. En el conjunto destaca el Espacio Escultórico, una muestra de arte colectivo que varía las reglas de lo que entonces se conocía como espacio público. Sesenta y cuatro grandes bloques triangulares de concreto dispuestos sobre un círculo exterior de 120 metros de diámetro rodean un mar de lava negra cercado en piedra volcánica. Incrustado dentro de la Reserva Ecológica del Pedregal, representa otro momento irrepetible: el ofrecimiento del arte a un público distinto, el estudiantil. Sorprenden los usos tan distintos que se le ha dado a esta extraordinaria figura: se ven desde personas meditando hasta encuentros amorosos. El tipo de cosas que puede generar una obra maestra.

  • Museos y centros culturales
  • Ciencia y tecnología
  • Ciudad Universitaria
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

El Pabellón Nacional de la Biodiversidad alberga más de 130 mil especímenes distribuidos en cuatro colecciones. Las exposiciones museográficas se mezclan con los espacios de investigación activa para difundir la riqueza de las colecciones biológicas nacionales.  Al entrar al edificio una de las cosas que más llama la atención es la escalera que conecta todos los pisos. Ofrece una sensación de espacio y continuidad entre las colecciones mostradas, permite que el pabellón tenga dinamismo arquitectónico y nos muestre lo que su museografía ofrece.   El nuevo recinto dedicado a la biodiversidad está ubicado al interior del Centro Cultural Universitario en la Ciudad Universitaria. El pabellón consta de tres niveles y ocupa una superficie de doce  mil metros cuadrados, una tercera parte del lugar está dedicada a la difusión. Además, el recinto cuenta con dos laboratorios, uno de Secuenciación Genómica y otro de Biología Molecular, donde  investigadores estudian el ADN de los organismos. Es un museo que estudia la biodiversidad mientras le muestra al visitante el proceso en la evolución, todo en el mismo techo.  La arquitectura remite a otros proyectos de Grupo Carso, pues Fundación Slim está detrás de este proyecto. En el lugar encontrarás una biblioteca con acervo digitalizado, cafetería, tienda de recuerdos y lo más importante; podrás conocer y conversar con científicos, como sacado de una escena de Parque Jurásico.  Abrirá por fin sus puertas a partir del 17 de junio, y puedes as

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  • Salas de cine
  • Ciudad Universitaria
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Filmoteca UNAM
Filmoteca UNAM

Fundada en 1960, la Filmoteca UNAM ha dedicado sus 61 años a rescatar, restaurar, catalogar, preservar y difundir imágenes en movimiento, convirtiéndose en uno de los archivos cinematográficos más importantes de Latinoamérica. Y es que este recinto nos recuerda a la caja de tesoros que todos tuvimos de niños; una caja de zapatos con piedras, estampas, juguetes y recortes de revista, solo que aquí tienen 15 bóvedas de alta tecnología que resguardan más de 46,000 mil archivos (ni dos vidas nos alcanzarían para verlos todos), manteniendo las películas de nitrato lo mejor posible para que tengan una vida más longeva. Pero más allá de ser un archivo de películas, guiones, cámaras, libros y aparatos relacionados con lo audiovisual, la Filmoteca destaca por las miles de actividades para difundir sus contenidos —¿De qué sirve resguardarnos si no se van a difundir?—. Además de sus salas de cine y el festival FICUNAM, este recinto está al tanto del circuito de fiestas cinematográficas de todo México, en las que participan anualmente como el Festival Internacional de Morelia (en el que han otorgado su Medalla Filmoteca UNAM). A manera de acercar a la gente estos documentos y mostrar los filmes en los que ha trabajado, la Filmoteca presentó en 2018 la primera edición del Festival Arcadia. Muestra Internacional de Cine Rescatado y Restaurado que tuvo como eje temático la conmemoración de los 50 años del Movimiento Estudiantil de 1968. Desde entonces se ha encargado de difundir piezas rest

  • Ciudad Universitaria
  • precio 2 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Entre teatros, museos y bibliotecas de la UNAM se encuentra un condecorado recinto dedicado a la degustación de la gastronomía mexicana. Por años, su chef ha investigado recetas de alrededor del país, como si de un académico se tratase. Lo cierto es que es la calidad de lo que aquí se cocina es una especie de anomalía positiva: uno esperaría una cafetería normal universitaria en un recinto como éste, de esas que venden sangüichitos y refrescos. Sin embargo, estamos ante uno de los mejores sitios de comida mexicana de la ciudad. Los platillos que han llenado de galardones al restaurante son las enchiladas de jamaica, el mole negro, el pescado tikin xic y los buñuelos rellenos de pato rostizado. Delicadezas de tonalidades prehispánicas, perfectas en su elaboración, justas de tamaño, y a un precio que sorprende por lo accesible. Además, constantemente ofrecen un menú especial de un festival de comida especializado en una región, un ingrediente o un platillo. Vale la pena mencionar el chocolate caliente y los originales postres como la espuma de guanábana, el nicuatole zapoteco o el tamalito de chocolate. El lugar en sí no es muy atractivo visualmente hablando. La terraza junto a la fuente es la zona más atractiva, si bien es evidente que el espacio arquitectónico no contempló tenerla. La decoración de la cafetería techada, en la parte superior, se limita a reseñas y artículos sobre el restaurante, premios y diplomas que el chef Ricardo Muñoz Zurita ha recibido, y las portadas de