Toni Collette en El legado del diablo
Foto: Cortesía Diamond Films

10 películas de terror contemporáneas que debes ver

Del terror psicológico de ¡Huye! y El legado del diablo, al gore de Mártires, estas son para nosotros, las mejores cintas de terror contemporáneas

Ángel Arroyo
Escrito por
Ángel Arroyo
y
Time Out México editores
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Amamos el terror. Nos permite sufrir sin consecuencias reales, nos deja explorar miedos profundos y, a veces, nos permite identifiquemos con los victimarios más que con las víctimas. Recientemente , este género ha llamado la atención de los festivales, críticos y audiencias por su renovado estilo y temas, pero tiene una historia abudante e interesante. Si bien es fácil pensar en los grandes éxitos de la historia como, por ejemplo, El exorcista (1973) y Psicosis (1960), sus origenes más antiguos.

Lo cierto es que este género nació junto con el cine mismo. Los inicios los podemos ver desde los hermanos Lumiere con la cinta La llegada del tren (1896), en la que los espectadores corrían despavoridos pensando que el tren saldría de la pantalla y los arrollaría; o el mago George Méliès que idearía y dirigirá La mansión del diablo (1896).

Después de eso el cine de terror pasaría por varias etapas y corrientes artísticas. Una de estas es el expresionismo Alemán con grandes aportes como Nosferatu (1922), El golem (1920) y  El vampiro de Düsseldorf (1931). Estás películas abrirían el camino para lo que sería el cine de monstruos, cuyos exponentes más importantes siguen siendo temas de disfraces y hasta de películas y series recientes. Algunas de las películas de monstruos de la época son: Frankenstein (1931), El hombre invisible (1933), El hombre lobo (1941), Drácula (1931) y El fantasma de la ópera (1925).

Sin embargo, las cintas de monstruos caerían en excesos, se volverían absurdas y el inicio de la Guerra Fría abriría la oportunidad para que el cine de ciencia ficción tomará el lugar como el rey del terror en su momento. Así, filmes como La guerra de los mundos (1953), Them! (1954) y hasta Alien: el octavo pasajero (1979) se coronarían como algunas de las más importantes para el género y cineastas como John Carpenter con La cosa (1982) y David Cronenberg con La mosca (1986) se consagrarían. 

Hoy en día, el terror tiene un nuevo respiro. Las típicas películas de jump scare dejan el lugar para nuevas propuestas y directores. Se alejan de lo convencional y en muchos casos sorprenden con sus ideas y el impacto de sus imágenes.

A manera de celebrar Halloween y Día de Muertos, buscamos las cintas que le han dado la vuelta al género y se han convertido en nuevos clásicos. ¿Cuál es tu favorita?

Recomendado: Películas recién reseñadas.

Las mejores películas de terror

  • 5 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

Inspirada en muchas películas de terror, desde El bebé de Rosemary (1968) hasta la psicologicamente aguda Babadook ( 2014), El legado del diablo (2018) se centra en Annie, una artista que construye dioramas increíblemente realistas: salas en miniatura que encarnan el tema de la película y demuestra que la herencia va más allá de los bienes materiales. La ópera prima de Ari Aster, quien ha demostrado tener dones para ubicar la cámara y tener una paciencia generosa, evocando al frío de Kubrick.

¿Por qué verla?
Esta cinta es un espiral de terror psicológico y sobrenatural que se va apretando poco a poco, jugando con tu angustia. Es un terror que se va construyendo con lentitud pero sin ser aburrido y que le da mucha frescura al género. Sin mencionar las increíbles actuaciones de Milly Shapiro y Toni Collete

  • 4 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

¡Huye! Fue de las mejores películas del 2017 y una notable primera película de Jordan Peele. Además es una propuesta innovadora para el terror estadounidense. La historia parece bastante sencilla: Chris, un joven afroamericano, se prepara para conocer a los padres de su novia Rose, una familia caucásica adinerada, en un viaje a la casa de campo de la familia. A pesar de que la bienvenida es cálida, hay algo que para Chris no termina de cuadrar. 

En parte es el extraño comportamiento del jardinero y la ama de llaves de la familia, el hecho de que gente de color desaparece misteriosamente en el vecindario o la insistencia de la mamá de Rose por darle una terapia de hipnosis para que deje de fumar. Poco a poco, tanto Chris como el espectador se irán dando cuenta de que las cosas no son lo que parecen.

¿Por qué verla? 
El terror que maneja es muy distinto al tradicional jump scare. Va armando la tensión y el miedo con lo incómodas de las situaciones. ¡Huye! es también un comentario social sobre las relaciones de raza en Estados Unidos con forma de thriller, que te deja al filo del asiento y te hace reír en el momento menos esperado.

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  • 4 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

Esta película es cine en su forma más pura y atrevida, sus sonidos y imágenes de terror se únen para darte un susto de muerte. Este filme se centra en una familia que debe enfrentar a unos monstruos con un oído superdesarrollado. Tanto la mamá (Emily Blunt), el papá (Krasinki), el hijo (Noah Jupe) y la hija (Millicent Simmonds) —cuya sordera significa que no puede escuchar a las bestias venir— sufren y sobreviven en silencio. Las actuaciones de Blunt y de Krasinski (que debuta como director en esta cinta) son sobresalientes en este ambiente de completo sigilo. La escena más estresantes giran en torno a un sótano inundado y persecuciones a través de un campo, parecida a Jurassic Park (1993). Todo hecho con brío despiadado.

¿Por qué verla?
La película se construye al más puro estilo del cine mudo. Apenas hay diálogos, pero sí hay una ambientación sonora que construye el el terror entre los personajes y la audiencia. También hay cierto secretismo ya que apenas sabemos de dónde vienen los monstruos o cómo la familia ha sobrevivido tanto, lo que se agradece al permitir al espectador imaginar y a la trama ser más ágil. 

  • 5 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

Las mejores películas de terror funcionan, en un nivel básico, más allá de la trama o las palabras; se agarran a tus entrañas. Suspiria (2018) es una película dirigida por Luca Guadagnino —famoso por Llámame por tu nombre (2017)—. Este remake de Suspiria (1977) de Dario Argento, es una de las cintas que más influyó en su género. Sin embargo, la versión más reciente de Guadagnino, aunque mantiene la idea original de una chica estadounidense que llega a una escuela de danza, se distancia en su estilo visual y termina siendo una historia completamente distinta al de la película original. 

¿Por qué verla? 
Suspiria es un acontecimiento espectacularmente extraño lleno de sangre. Sin duda es impactante. Las actuaciones de Dakota Johnson y Tilda Swinton son brillantes, tanto en los momentos más de pláticas tranquilas como en los de más intensidad. Aunque resulte shockeante, eso es justamente lo que el director buscaba. 

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Está detrás de ti
  • 4 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

Cuando uno crece, los monstruos y pesadillas se transforman. Las travesuras, por ejemplo, de It (Tommy Lee Wallace, 1990) ya no tienen el mismo efecto que en nuestra infancia. Ahora, causa pavor la propuesta del director David Robert Mitchell, quien en Está detrás de ti (It follows), crea un thriller a partir del enamoramiento, el sexo y la persecución. 

Trata de una joven de 18 años, Jay, que tras tener relaciones sexuales con un chico en la parte trasera del auto, este le explica que le acaba de transmitir una maldición en la un espíritu la perseguirá hasta matarla o hasta que ella tenga relaciones con alguien más y le pase la maldición.

¿Por qué verla? 
El terror que maneja no es precipitado, más bien, es de desesperación. El espiritu no es rápido, pero sí perseverante y la persona maldita sabe que sin importar donde vaya, en algún momento lo alcanzará y morirá. Esta desesperación se transmite muy bien a lo largo de la película. Es, de hecho, una situación reconocible en muchas personas que huyen de lo inevitable.

  • 5 de 5 estrellas
  • Cine
  • Thriller
  • Crítica de Time Out

Con El faro casi puedes saborear la sal en tus labios. Esta es una cinta sobre un par de fareros que viven en una isla lejana, frente a la costa de Nueva Inglaterra, a principios del siglo XIX, y está iluminada por las fascinantes actuaciones de Robert Pattinson y Willem Dafoe. 

Dafoe es Tom Wake, un viejo perro de mar con una pipa de barro que sobresale de su gruesa barba y el jefe del faro. Una amalgama de clichés salados (que el guión reconoce ingeniosamente, incluida su pata de palo); amor por la ginebra, las canciones de mar y la langosta. Pattinson interpreta al exmaderero Ephraim Winslow, recién llegado de Canadá. Es el tipo fuerte y silencioso que parece tener uno o dos esqueletos en su armario.

¿Por qué verla? 
Esta película un completo descenso a la locura. Su director, Robert Eggers, ya había puesto al límite a toda una familia en La bruja (2015) y con El Faro no solo quiso poner a dos hombres al filo de la locura, sino transmitir el terror que eso puede generar en la audiencia. La película aún no estrena pero lo hará en México en el Festival Internacional de Cine de Morelia y probablemente llegue en los próximos meses a salas comerciales. En esta cinta, Robert Pattinson demuestra sus dotes de actor.

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Mártires
Foto: Cortesía IMDB

7. Mártires

La violencia en el cine, más que incitarnos a realizarla, nos libera. Elimina nuestros peores deseos. Algunas películas abusan de esto y dan sangre por litros y de forma completamente gratuita. Sin embargo, en Francia hubo una nueva corriente cinematográfica, el nuevo extremismo francés, que dotó al género de terror, y en especial a estas películas hipeviolentas, de más fondo y sustancia. Uno de los grandes ejemplos del terror desde el extremismo francés es Mártires (2008). 

La trama gira en torno a la joven Lucie, que escapa de un lugar donde fue torturada por mucho tiempo. Llega a un orfanato, donde hace una amiga. Pasan los años y parece que crece con normalidad, pero pronto veremos que las heridas que tuvo antes de llegar al orfanato, nunca sanaron. 

¿Por qué verla? 
Aunque sin duda es una cinta llena de sangre y violencia, también tiene una trama ya de por sí aterradora, sobre traumas y dolor. Se ha convertido en una cinta de culto y sin duda merece ser vista para los fans del terror y sobre todo para los fans de gore.

  • 5 de 5 estrellas
  • Cine
  • Drama
  • Crítica de Time Out

Es raro que una película combine fuegos artificiales cinematográficos y comentarios sociales de una manera bastante emocionante y traviesa, algo que el director coreano Bong Joon-ho maneja con Parasite, un hábil drama de invasión al hogar que refleja las máscaras que usan sus personajes: educados hasta que deja de fingir. 

Cuenta la historia de una familia pobre de Seúl que se infiltra en la vida de un hogar súper rico a través del suspenso, el drama, las risas y la farsa, permitiendo momentos de puro terror, observación silenciosa y ruido para sentarse felices uno al lado del otro. La trama inicia cuando Ki-woo (Choi Woo-shik), el hijo veinteañero de la familia, falsifica su CV y ​​comienza a dar clases particulares a la hija de un apuesto joven empresario rico, Park (Lee Sun-kyun) y su esposa igualmente atractiva y pulida Yeon-kyo (Cho Yeo-jeong). 

¿Por qué verla?
Al igual que buena parte de la filmografía de Bong Joon-ho, esta película tiene un fuerte comentario social de clases, solo que es mucho más sutil y contundente que en, por ejemplo, Okja (2017) o hasta en El expreso del miedo (2013). Además, es una película increíblemente tensa y aterradora a momentos, no idealiza a ninguno de sus personajes y los pone en situaciones realmente complicadas. Y no olvidemos que es la ganadora de la Palma de Oro del pasado Festival de Cine de Cannes, cuyo jurado era presidido por Alejandro González Iñárritu. Podrás verla en lo Mejor del FICM en la CDMX durante noviembre.

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La casa de los 1,000 cuerpos
Foto: Cortesía IMDB

9. La casa de los 1,000 cuerpos

Aunque el cine gore estadounidense no se caracteriza por ser tan violento y a la vez propositvo como el europeo, hay algunas películas que sobresalen y encantan a su público por años. Muchas de ellas son de bajo presupuesto, pero sus fans las siguen apreciando con el paso de los años, hasta hacerlas películas de culto. Un gran ejemplo de esto es La casa de los 1,000 cuerpos (2003). 

Se desarrolla en 1978 y trata de un grupo de jóvenes que buscan al científico Dr. Satán, aunque realmente creen que es una leyenda urbana. Por desgracia para ellos, encuentran la casa de este personaje que ha educado a toda una a familia como asesinos seriales que practican necrofilia, tortura, ritos satánicos y hasta canibalismo. 

¿Por qué verla? 
Su estilo visual recuerda a ligeramente a películas de Tim Burton, pero con mucho más sadismo, lo que la hace peculiar en su género. No pretende ser una sátira, sino causar mucho terror. También es un homenaje a la original La masacre de Texas (1974), ya que, como slasher, recupera sus elementos más claros como la persecución y asesinato de un grupo de jóvenes irrespetuosos. Incluso la sitúa en la misma época en la que se filmó. Su director, el músico Rob Zombie, debutó con esta película.

  • 5 de 5 estrellas
  • Cine
  • Horror
  • Crítica de Time Out

El horror es lo que le pasa a las personas que ya están vacías y son vulnerables. Esa es la idea que Aster ha dado en sus dos ultimos trabajos, primero con Toni Collette como una furiosa madre al final de la cordura en El legado del diablo, y ahora con Florence Pugh como Dani en Midsommar: El terror no espera la noche

Dani se encuentra en una relación desgastada con Christian, quien tampoco se siente ya tan feliz con ella. Sin embargo, su ruptura se pospone al sucederle una tragedia impensable a ella. Christian, por su parte, lleva tiempo planeando una salida a Suecia con sus amigos, a la comunidad de uno de ellos en la que celebran un festival de verano llamado Midsommar. Christian invita a Dani un poco a la fuerza, pero las cosas se pondrán aterradoras cuando la comuna empieza a mostrar una cara distinta. 

¿Por qué verla?
Al igual que en El legado del diablo (2018), Midssommar: El terror no espera la noche, el terro que desarolla es pausado y nace de lugares poco comunes. Por ejemplo, toda la película se desarrolla con luz del día y en un ambiente que en principio transmite más alegría que miedo. Esta paradoja, aunado al estado mental de Dani (lleno de confusión), hace de Midsommar una película refrescante e imperdible para los fans del terror. 

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