Eduardo García siempre quiso abrir una brasserie clásica y cumplió su sueño con Havre 77. Desde sus comienzos en Brasserie Le Coze y Le Bernardin de Eric Ripert, el chef de Maximo Bistrot se enamoró de la cocina francesa tradicional y de sus técnicas que no admiten atajos: el producto debe ser de primera calidad y hay que dedicar todo el tiempo del mundo a las cocciones. Ese cuidado se nota en cada plato: la comida fue impecable del primer tiempo al último. Comenzó con el lobster roll, pan brioche coronado con aguacate y tierna langosta, que contrasta con el pungente aderezo de horseradish (rábano picante). Siguieron frescas ostras —de Cardón, Baja California, grandes y de sabor suave, y Kumamoto, pequeñas, intensas y cremosas— con apenas unas gotas de mignonette (vinagreta con echalotes). El plato fuerte fue un perfecto huachinango à la Meunière con mantequilla dorada, tomillo, alcaparras y limón. Para cerrar, esponjosos buñuelos de ricotta con frutos rojos. El espacio con interiorismo de Charles de Lisle es austero y luminoso, los puntos focales son la barra de zinc y los vitrales originales de la casona del siglo pasado: así brillan más los ingredientes y el talento del cocinero que los prepara, que es donde reside el auténtico lujo de Havre 77, un lugar que, de no ser por sus elevados precios, visitaría casi a diario.
Oh la la, porque la comida gala nos encanta, te enlistamos los mejores representantes de comida francesa en la Ciudad de México. Al igual que en México, hay ingredientes diferentes por cada región de Francia: al norte emplean más mantequilla, y al sur hay gran influencia de hierbas. Experiméntalos desde las sartenes mexicanas.
También apunta los 8 bistros en la CDMX que te volverán loco y las mejores panaderías de la Ciudad de México. Si te quedas con ganas, revisa la guía de los mejores resturantes de cocina europea y descubre más sobre esta gama de sabores que enamora al mundo entero.
Recomendado: Los 50 mejores restaurantes en la CDMX.