Bravo Capital, cafetería Escandón
Foto: Alejandra Carbajal

Restaurantes y cafés en la Escandón

Pizzerías, cafeterías y fondas que debes visitar en esta zona de la Ciudad de México

Escrito por
Time Out México editores
Publicidad

Si ya recorriste todos los restaurantes de la Roma y la Condesa, es el turno de que visites las opciones que te da la Escandón.
Esta colonia del poniente de la ciudad destaca por sus cafeterías, pero también tiene cantinas divertidas, ¿cuáles son tus favoritas?

Dónde comer y beber en la Escandón

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Escandón

Junkyung Lee o Lucas, como se llama en español, es el simpático dueño de un nuevo restaurante coreano que abrió en la Escandón en junio. Respecto a la decisión de nombrarle Oppa, el chef nos comenta: “Normalmente los coreanos ponen nombres muy difíciles, pero Oppa, si sabes abrir la boca, puedes pronunciarlo, y además, todo el mundo conoce Oppa Gangnam Style, por lo cual es muy fácil de pronunciar y divertido. Además, incluye a la cultura coreana, pues significa “hermano mayor” y las mujeres les dicen así a los hombres, cuando ellas tienen menos edad. Quería poner algo chistoso y fácil”. Cuando le pregunté qué era lo que ofrecían en el restaurante, sin dudarlo respondió: “la felicidad”. “Queremos trabajar mucho para darle más valor a la experiencia, que no solo prueben los platillos, sino que se sientan felices después de haber estado en Oppa”. Y es verdad que después de comer aquí, el comensal se va satisfecho y feliz de haber probado una auténtica comida casera coreana.  Al llegar por la calle de Prosperidad, encontrarás todas las opciones de menú escritas en una pizarra negra junto a las mesas al aire libre. Si bien el ruido puede ser un poco abrumador, al primer bocado, dejará de importar. Es ideal para ir acompañado, pues las porciones se prestan para compartir.  Al ser un restaurante tan nuevo, aún se encuentran probando cuáles son los platillos que más atraen al paladar local, sin embargo, ya hay varios ganadores que se quedarán en su carta. La base de todos es el arro

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Escandón
  • precio 2 de 4

La Central de Pizzas no es otro de los muchos restaurantes argentinos que hay en la zona. Más bien es un lugar bullicioso en el que siempre hay ambiente de viernes, aunque sea lunes. Abrió sus puertas a mediados de 2011 y desde esa fecha se ha consolidado como una excelente opción para comer o cenar. En marzo de este año se inauguró la sucursal de Polanco.Tiene un estilo relajado e informal, la decoración es como la de un deli de comida rápida, con azulejos negros y blancos, piso de ajedrez, lámparas rojas y sillas de madera que se asemejan a las de los directores de cine. Tiene una terraza agradable, con macetas colgando, en la que se puede fumar cuando no está cerrada por las paredes de plástico rojo. Puedes checar el menú y las promociones en los pizarrones que se encuentran arriba de la barra donde entregan la comida.Su menú es muy variado, pero tiene una de las pizzas más originales en el mercado: la de palmitos extra, que combina muchos ingredientes que pueden sonar raros pero que en conjunto la hacen deliciosa: salsa de tomate, queso mozarella, orégano, jamón, pimiento morrón rojo, aceitunas y huevo cocido. Además, se puede pedir de masa delgada o gorda, pero lo más interesante es el aderezo de salsa golf, una especie de “mil islas” que consiste en catsup con mayonesa. Vale la pena probarla.Por otro lado está la milapizza, una milanesa empanizada con salsa de tomate y queso fundido como si fuera una verdadera pizza de carne. Si quieres comer balanceado, la ensalada gri

Publicidad
  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mexicana
  • Escandón
  • precio 1 de 4

Visitar esta fonda es como entrar a un Pueblo Mágico, tiene una decoración sencilla y minimalista que te enamora; el verde brillante en las sillas y mesas contrasta con la madera, luego los espejos hexagonales aquí y allá, creando un efecto de panal de abejas con el piso que se extiende a un cuarto de la pared. Hay un envolvente aroma a comida mexicana desde la entrada que te avisa sobre la experiencia culinaria que te espera. Para comenzar, el mesero me recomendó un refresco artesanal de manzana, traído de Zacatlán de las Manzanas, Puebla; es inmensa la diferencia con los productos comerciales. De la carta de comida pedí la sopa de fideo con tuétano (imperdible) y un tlacoyo de requesón y escamoles. La sopa me transportó a una comida corrida y los pequeños trozos de tuétano cambiaron totalmente la composición del platillo. Encontré la masa del tlacoyo un poco seca, pero la combinación de quelite, escamoles y requesón fue perfecta para complementar con un agua de guayaba con menta. Ambos platillos fueron ejemplo de lo simple y bien hecho; los sabores de cada elemento de los platillos resaltó al pasar por la boca y las porciones exactas para seguir comiendo sin reventar. Para terminar pedí un pan del anaquel, era un cuernito con chocolate en la parte superior, la masa artesanal preparada con cuidado y llena de sabor. Lo acompañé con una bolita de helado de vainilla, fresas y unas tejas de galleta. Nomeolvides es un paraíso de platillos mexicanos, es importante resaltar la ejec

Heladería Escandón
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Heladerías
  • Escandón
  • precio 1 de 4

Entre las leyes de la naturaleza, se encuentra aquella que dicta que todo individuo que se toma un helado es feliz. Digamos que esta versión semisólida de la comida tiene eso que llamamos “el efecto Ratatouille”, ya que te transporta a aquella etapa cálida y sin problemas que alguna vez tuviste. Christian e Illán Castañeda lo ejecutan a la perfección en su pequeña Heladería Escandón. Prepárate para un golpe de nostalgia gracias a la colección de juguetes que decoran el local: “un Pato Donald de cuando éramos chiquitas”, me dijeron, un Dumbo, robots ochenteros y otras joyas de la infancia. En cuanto a los helados, todos se preparan con ingredientes naturales, orgánicos y, sobre todo, bajo los principios de la botánica y la herbolaria (ojo, que no es medicina), también los hay balsámicos. Además, usan plantas y flores como azahar, cempasúchil o lavanda, con las que también infusionan sus tisanas. De acuerdo a la temporada, te puede tocar un helado de limón con cedrón (bueno para bajarle al estrés y para la panza), de crema de albahaca, de mascarpone con buganvilia y otros sabores que se mezclan con jengibre o cardamomo; también hay opciones clásicas como un delicioso helado de mamey. Sí, probé todos los sabores hasta sentirme como niña en el recreo. Al fin y al cabo, se trata de que esto sea un apapacho para el alma y para el cuerpo. Para ponerle un toque de humor a la alegría, todos los helados que salen de aquí tienen un par de ojitos comestibles. “Como que los helados sí tie

Publicidad
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Escandón
  • precio 3 de 4

Combinación ganadora: micheladas y ceviches. Ese concepto, sencillo pero completísimo, es la columna vertebral de Micheviche, que acaba de abrir su segunda sucursal en la Escandón. La propuesta marisquera no es la convencional; aquí puedes encontrar joyitas como una tostada de pata con pulpo o un caldito de camarón que viene con ramen; es picosito, va bien sazonado y es perfecto para curar el hambre o los estragos de la fiesta de la noche anterior. Además, de jueves a domingo tienen una propuesta garnachera y monchosa; como si la comida callejera citadina se juntara con los productos del mar: prueba la gordita de jaiba o de mantarraya, los sopes de chicharrón y pulpo o los tlacoyos de jaiba  El cuanto a los ceviches, hay hartas opciones. Si no le haces al pescado, tienen uno de hongos, y también tienen el tradicional; el ceviche mochis que va con chile habanero; el yucateco, servido con chile güero y aceituna, y el ceviche estrella, el especial, que va con una salsa de cacahuate y chile de árbol. Además, puedes pedir tu cevichito con pescado, camarón o mixto. Las porciones son súper abundantes, ideales para el hambre de la buena o para compartir, pero si quieres probar un poco de todo, también lo puedes pedir en tostadas, que son más pequeñas y te darán oportunidad de entrarle a alguna otra cosa.  Lo imprescindible (y combinación ganadora con los ceviches) son las micheladas. Te la puedes dar como tú quieras: un vaso, una bola o un litrote. Tienen las tradicionales preparacio

Bravo Capital
  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Escandón

Bravo Capital es el chico nuevo de la Escandón, su alma fresca se contagia. Es una gran opción ya que se encuentra justo frente al parque del barrio: el Jardín Morelos. Destaca su estilo minimalista (techos amplios, un gran bodegón, pocas mesas). Es ideal para reuniones de trabajo, pues cuentan con mesas de ocho personas, espacios más íntimos para citas y una barra para aquellos días en los que tu romance sea sólo con tu libro  y tu latte. No tienen especialidades de café, su barra es de café de Coatepec que te sirven como americano, latte, capuchino y moka. Dicen que a donde fueres, ¿come lo de la casa? Pues bien, aquí hay de dos: ensalada escandón, que incluye espinaca, nuez caramelizada, manzana, aguacate y aderezo; o el bravo pesto sándwich, con pollo al pesto, manchego y aguacate. Si tienes antojo de algo dulce hay ricos waffles con fresa y plátano; además de rosca de naranja y fresas con crema. En cuanto al personal, son muy amigables, te sugieren platillos y se interesan porque estés cómodo. Eso, aunque es su obligación, siempre se agradece. Cierran hasta la medianoche y venden cerveza artesanal y vino, ¿qué más puedes pedir? Además son petfriendly.

Publicidad
Yume
  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Salas de té
  • Escandón
  • precio 1 de 4

De la noche a la mañana apareció un bonito local que sorprendió a toda la colonia. Es atendido por las hermanas Paulina y Silvia Herrasti, quienes se dedicaron a hacer una búsqueda exhaustiva de inigualables objetos de distintas épocas y diferentes partes del mundo: joyería, muebles vintage, antigüedades, banderitas tibetanas, juguetes y muchas otras curiosidades. Yume es un vocablo japonés que significa “sueño”. Fue elegido de acuerdo a la necesidad de encontrar un nombre abstracto, que fuera fácil de recordar y original, además de relacionarse directamente con la esencia de la tienda y lo mejor de todo es que también tiene servicio de cafetería, así que mientras decides qué comprar, necesitas trabajar o simplemente ponerte al corriente con alguien, puedes tomar un rico café molido y preparado al momento o mejor aún la bebida estelar del establecimiento: el matcha latte. El matcha es una bebida originaria de China que posteriormente se trasladó a Japón, convirtiéndose en un té ceremonial para los monjes budistas de aquella región. La preparación de la bebida se remonta hasta antes de su cosecha, puesto que se cubre la planta de té para evitar su crecimiento, conservando ese característico color oscuro y verde intenso. Gracias a este proceso, el té adquiere de manera natural un sabor más dulce. Tras la cosecha, se les retira el tallo a las hojas para poder moler sólo las partes más blandas, dando como resultado una especie de “talco” verde, el cual, hasta este momento, recibe

Cleotilde
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Cafés
  • Escandón
  • precio 1 de 4

El gran aparador de cristal que da a la calle de Progreso deja ver a cuatro matutinos clientes. Sentados en fila, frente a una pequeña barra, toman un café americano, un latte, una tisana y un chai. No cabe nadie más, pero dicen que el diablo está en los detalles y para fortuna de la barra de café Cleotilde, el diablo sí bebe buen café. Esta reciente apertura de la Escandón cumple la máxima de bueno, bonito y… quizás, no barato, pero sí justo. Cuenta con café veracruzano que se puede pedir en diversas especialidades (chemex es mi favorita, que –por su falta de sedimentos y grasa– elimina el amargor extremo de la bebida), hay chocolate frío hecho de manera artesanal y cold brew, para estos tiempos calurosos. Su carta se basa en seis tipos de paninis. En mi visita probé el de pechuga de pavo con queso holandés y queso cotija. Muy recomendable, aunque, le gana la partida por default el de queso holandés, queso monterrey y queso roquefort. Si bien no son platillos muy elaborados ni responden a un desayuno de gorditos, el lugar tampoco va por esa dirección. Lo suyo es el café y la experiencia de ir por tu taza y continuar el camino. El servicio es sumamente amable y si bien es labor obligatoria del anfitrión, hay que levantar las palmas cuando los dueños del negocio están al filo de la barra explicando las virtudes de los métodos, el origen del café y las bondades de sus granos. Café y apapacho, ¿qué más puede uno pedir?

Publicidad
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Escandón
  • precio 2 de 4

Una marisquería con auténtica comida nayarita que recuerda a sus clientes la importancia de la cultura huichol. Tienen especialidades como aguachile de camarón, tostada de marlín ahumado y pescado sarandeado, pero no se pueden ir sin probar el chicharrón de pescado con aguacate.

El Ilusionista
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Cafés
  • Escandón
  • precio 1 de 4

Un ilusionista cambia la percepción de la realidad, tal como lo hace este lugar donde los granos de café se convierten en un una taza humeante de un brebaje aromático. Este es un rincón agradable de la Escandón, en el que encontrarás una mezcla de mobiliario que va desde lo vintage, hasta el clásico tablón campirano para compartir mesa. Por dentro hay bastante luz y un toque decorativo con colores pasteles y música a buen volumen. En la entrada destacan los postres dispuestos a plena vista (para que abras apetito) y en la barra, no podrás ignorar las prensas francesas y los molinos tradicionales que, además, están a la venta. Te sorprenderá la amplitud de opciones que El Ilusionista preparó: siete tipos de extracción de café americano, como un aeropress sobre hielo; tés y tisanas; el poderoso espresso para el que no se despierta con nada y lo mejor de la visita: la pócima. Este brebaje es la bebida de la casa, y como buena ilusión, no te imaginas lo que estás a punto de probar. Es un espresso con pulpa de guayaba; está a punto en dulzor y no requieres echarle nada más. El sabor de la fruta es intenso, pero sin predominar, y el café hace presencia recordándote que en algún momento el grano fue tostado, tal y como el barista quiso que fuera. Recomendamos acompañarlo con un pan dulce, como un muffin de blueberry. Si no tomas café, puedes optar por el chocolate artesanal, que es orgánico y traído de Chiapas; te ofrecen un vaso de agua para que limpies tu paladar y percibas mejor

Recomendado
    También te puede gustar
    También te puede gustar
    Publicidad