Foto: Jordana BTP

Restaurantes y cafés en Tlalpan

Descubre las propuestas de cafés y comida en esta zona del sur de la Ciudad de México

Escrito por
Time Out México editores
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Las propuestas gastronómicas de otras zonas de la ciudad como la Roma, Condesa o San Ángel, han dado mucho de qué hablar. Sin embargo, en Tlalpan también puedes encontrar una gran variedad de restaurantes y cafés de especialidad

Restaurantes y cafés en Tlalpan

Parrilla Paraíso
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Uruguaya
  • Zona Metropolitana
  • precio 3 de 4

No importa que la escandalosa avenida Insurgentes esté a un costado, pues este lugar transforma su entorno sin salir de la urbe sureña. Parrilla Paraíso es un jardín cubierto en flores y luces, ideal para visitarlo de noche con tus amigos o con tu pareja y pedir una cerveza artesanal. Incluso pueden ir las mascotas y correr libremente. El menú denota mucho respeto hacia la composición natural de los ingredientes. La especialidad de la casa es un pescado totoado de criadero, una especie que solamente se encuentra en el mar de Cortés; viene servido sobre cama de puré de papa y zetas. Mientras más busques en la carta de cervezas, más peculiares las encontrarás, pues a pesar de que tienen etiquetas comerciales, el fuerte son las artesanales originarias de la Ciudad de México; por ejemplo, la monstruo de agua que ofrece cervezas híbridas: una denotación que se les da porque la fermentación se hace a través de una combinación de frutas, cereales, mieles y plantas. No olvides echarle un ojo al mapa cervecero que te indica de dónde provino tu bebida. Si piensas que la mejor manera de cerrar una comida es con el postre, dale al blanco pidiendo el fondant de dulce de tapioca. Resulta una combinación de grandes texturas con el helado contrarrestando lo azucaroso del dulce de leche. Tip: si el ambiente se pone frío, pídeles unas mantas y sigue disfrutando de tu visita y sus grandes sabores urbanos.

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Ajusco

En casi todas las familias existe esa persona encargada de prender el fuego porque cree que es un experto en parrilla, pero, egos aparte, siempre se puede aprender mucho más de los profesionales. Azur es un patio boscoso, aparentemente similar a otros de la nueva oferta de oasis montañosos para alejarse por un día de la vida citadina. Para llegar, lo más sencillo es subir por toda la Picacho-Ajusco sin desviarse por las calles aledañas. Una vez que llegues, respira el aire fresco y date un momento para contemplar la vista al Pico del Águila (se vale llevar chamarrón o hasta cobija de tigre porque más tarde el frío se pone denso). Volvamos a la carne, ya que este lugar se presta para entrarle como Picapiedra. Azur no solo es especial por su cocina, sino por el concepto grill table que manejan. Cada mesa tiene integrada una parrilla donde el grill master se coloca frente a ti para dar una clase práctica sobre el arte del fuego y los cortes. Prender el carbón está bien, pero ¿sabes de qué sección de la res viene un Tomahawk o qué ocurre si le echas cerveza a la carne mientras se asa?  Están muy preparados en el tema, así que aprovecha la experiencia para resolver todas tus dudas, tomar nota y hasta parrillear tú mismo un Cowboy o un T-bone; al salir estarás listo para presumir tus habilidades cuando se arme la carnita asada. En mi caso, lo más difícil fue concentrarme mientras el olor de la carne y la salsa martajada de tuétano (también hecha al momento) me hacían agua la boca.

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La Casa del Pan Papalotl Cuicuilco
  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Peña Pobre

Se definen como una pastelería y cafetería artesanal, vegetariana y orgánica. Eso se traduce en variadas opciones de desayunos, pan delicioso recién hecho y hasta suculentas hamburguesas que jurarías son de res. Lo ideal es llegar temprano, antes de las 10am o tendrás que esperar hasta media hora, pues el lugar es muy pequeño, unas 6 mesas. Para empezar, un cuernito relleno de queso y zarzamora o hotcakes de amaranto con papaya y miel de maguey. O bien, las quesadillas azules con queso gouda y quesillo, rajas o champiñones. Para los más tradicionales, chilaquiles verdes o rojos con huevo, aunque también podrías optar por los minimolletes con chorizo de soya. Ahora que si el desayuno no está completo sin huevo, debes probar el omelet de verduras (champiñones o acelgas salteadas al curry). Para tomar, el café orgánico es casi garantía de felicidad –aunque para mi gusto, un poco aguado–, un espresso para los más intensos (sí me gustó) o un té como el casa papalotl (manzanilla, canela, tila, limón y jamaica) que, dice, es bueno para la digestión y contra la tos, el resfrío y el insomnio. Después de mediodía, lo recomendable es la sopa del día y la hamburguesa papalotl (bollo integral con carne de gluten de trigo, mayonesa, lechuga, germinado, jitomate, queso y champiñones); lamentarás todas las veces que visitaste alguna cadena de comida rápida. Ya entrada la tarde, puede ser idóneo para un café y un pastel, los de elote o zanahoria están para repetir en casa, pues además tienen

Olenna
  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Padierna-Pedregal

Si hay alguien que conoce la pureza de los ingredientes, es el chef Maycoll Calderón. Huset, su primer restaurante, es el homenaje de la cocina de campo, y Olenna, la más reciente apertura, te transporta a tierras mediterráneas. La ubicación en Artz Pedregal le da aires de corbata apretada, pero en fines de semana se olvidan las formalidades y es un espacio muy familiar, rodeado de vegetación, con mucha madera y espacios abiertos para iluminar naturalmente. Es una cocina cargada de especias, en el buen sentido: hay sabores fuertes de aceites y vinagretas. El humus se realza con paprika y un sazonado pan pita, entrada a la que puede seguirle un untuoso y dulce camarón azul montado en calabaza. El rotini, aunque no muy arriesgado, es cumplidor en cuanto a la textura de la pasta y frescura del tomate con queso de cabra. Mientras que el pulpo a las brasas presume de tentáculos esponjosos sin sentirse gomosos y un intenso toque de olivo con muchas alcaparras. La trufa de chocolate es un auténtico viaje por entre olas saladas, cuyo aceite de oliva terminó por apuntalar a las papilas de tanto sazón pero el cacao actúa como salvavidas. Maycoll maneja el timón de Olenna en una dirección complaciente y muy atenta.

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D'Lagourmet
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Tiendas gourmet
  • Padierna-Pedregal
  • precio 1 de 4

Es una boutique gourmet y tienda de sándwiches. Tiene un espacio para comer y anaqueles con sus productos en muestra. Encuentras embutidos como fuet, jamón serrano, chorizo ibérico y salami, quesos como parmesano, de cabra, triple crème y feta, aceitunas de Kalamata, café, vinos, conservas, latería, aceites y vinagretas; vaya, una tienda gourmet con un catálogo completo para que llenes la despensa con algo más que la canasta básica. Tienen alimentos preparados como tartas y panqués, aunque el encanto principal son los sándwiches. Arma el tuyo por 50 pesos, te recomendamos pedir el de roast beef con queso morral ahumado y un aderezo de mostaza dijon o de chimichurri. El de pastrami y el de chorizo de pamplona también son una excelente opción pues saben caseros.

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Peña Pobre

Dice la canción que el tango es la emoción de regresar al punto cardinal. A más de siete mil kilómetros de distancia, Buenos Aires se antoja lejanísima de la Ciudad de México, pero la distancia se acorta en Piantao con sus Jueves de Tango, que ocurren todos los últimos jueves de cada mes, a las 20:30 horas.  Más embajada porteña que restaurante al sur de la ciudad, aquí se siente la nostalgia bonaerense. ¿Qué se extraña? La Argentina misma, puede ser, o se lamenta nunca haberla conocido. El bandoneón con su queja, el baile a contrapunto, el canto con pena, el corte en su término, el vino en la mesa… Los últimos jueves de cada mes todo está dispuesto para viajar al Cono Sur en un par de horas… Y volver –con la frente marchita– como cantaría Carlos Gardel. La cancilleres artísticos en los Jueves de Tango son Romina Marconi, con una voz que al tango lo emociona, y Héctor “Bocha” Mazza, pianista de manos equilibristas que saltan entre octavas. Están también Ángel Pérez, con su rodilla clavada a las costillas del bandoneón,  Valeria Lorduguin soltando latigazos con sus piernas enmalladas, y Leonardo D'Aquila con pantalón abombachado, pinta de compadrito y mirada de guapo, tal como los describiera Jorge Luis Borges en sus cuatro conferencias. Recorren los bailarines los pasillos del restaurante. Van así, medio bailando y medio volando como dos locos o piantaos, como se dice en la palabra lunfarda que da nombre al lugar. En esta celebración porteña figuran los comensales y sus canto

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El Caldero Chorreado
  • Restaurantes
  • Cafés
  • La Joya
  • precio 1 de 4

De fans para fans llegó El Caldero Chorreado, un café ambientado en torno al mago favorito de los millennials: Harry Potter. Como un pequeño homenaje a Hogsmeade –el pueblito que visitaban los alumnos de Hogwarts en sus días libres—, el café no se encuentra en una zona céntrica de la ciudad, haciendo del recorrido un tiempo propicio para fantasear sobre los brebajes que se desparraman de la olla. El espacio, decorado como un castillo, casi hace pensar que las figuras de sus cuadros se moverán, y conforme baja la luz del sol aumenta su encanto. A diferencia del comedor de Hogwarts, no es necesario sentarte con los de la misma casa, pero puedes marcar la diferencia pidiendo la soda que te corresponde: mora para los de Ravenclaw, sandía-fresa para los de Gryffindor, o la marca tenebrosa (refresco de cola con helado de limón) para los de Slytherin, por nombrar algunas. Sin embargo, la piedra filosofal de la casa es la cerveza de mantequilla, una bebida sin alcohol, con trazos amargos y avainillados. El cappuccino, una pintoresca opción para los grandes, seguramente se le antojará hasta a los más pequeños, ya que el arte latte de esta taza es una silueta en caramelo del famoso “niño que vivió”. A la cocina caliente quizás le faltan algunos movimientos de la varita: las chapatas, baguettes y burritos se quedaron en el mundo muggle. Por otro lado, los postres no hacen distinción de la posición que juegues en Quidditch ya que, sólo en el Caldero Chorreado, la snitch es servida a tu m

  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mexicana
  • Coapa
  • precio 1 de 4

Este es un gran secreto de la zona sur de la CDMX. Los tacos son tan célebres que tres días de la semana es suficiente para tener un público fiel y agradecido. Los tacos rebosan de relleno, sobre todo el de adobo. Por si fuera poco, las salsas están en su picor exacto. Aunque no tienen dirección precisa es fácil encontrarlos: el puesto con mayor aglomeración de gente sobre Calzada del Hueso, justo a un costado de Pericoapa y frente al supermercado.  No te quedes con las ganas y prueba todas las recomendaciones del top 5 de tacos de canasta.

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Dolce Amore Ristorante
  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Tlalpan Centro
  • precio 3 de 4

¿Qué pasa cuando mezclas el romance de La vida es bella con el espíritu bohemio del centro de Tlalpan? El resultado es un restaurante italiano sin pretensiones que se presta a que las palabras de amor salgan como pan caliente. Claro, eso si no te distrae el olor del ajo de los platos que desfilan junto a ti o las pinturas a gran escala de callejones italianos sobre las paredes. Aunque aquí el ambiente puede ser un poco señorial -como para ir con tu tía a medio día- por la noche, se transforma en un lugar donde se antoja llegar tomado de la mano de alguien. Comienza la velada con uno de sus vinos italianos de buen costo-beneficio, mientras les das una hojeada a la carta del chef Julio Alonso. Ante cualquier duda, el camino a seguir son las pastas preparadas artesanalmente, o los platos fuertes cubiertos por una salsa estilo casero. Los calamares portofino fritos acompañados con arrabiata y tártara podrían sonar a una ópera cantada por un veneciano en su góndola. Lo cierto es que, aunque tienen una buena consistencia, les falta un poco de magia o, tal vez, una pizca de sal y pimienta. En cambio, la ensalada nonna nos regala algo de felicidad. La combinación de las espinacas con los berros, los trozos de manzana, los piñones y el tocino crocante con aderezo de mostaza y miel, logran un buen contraste de texturas, acidez y dulzura. El clímax de la película sucede en la llegada a la mesa del fettuccine nero di seppia con camarones. El término al dente de la pasta es preciso como e

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Mexicana
  • Zona Metropolitana
  • precio 1 de 4

Estas son quizás las mejores enchiladas de la ciudad. Es una declaración osada pero que se sostiene en su sabor y originalidad. Hay enchiladas con ingredientes y modalidades de casi todos los estados y rincones del país: morelianas, celayenses, toluqueñas, tapatías, potosinas, tepoztecas y queretanas; también con sorpresas como cochinita pibil, arrachera y carnitas.  Las michoacanas (no confundir con morelianas) sobrepasan las dos dimensiones. Su copete de col y pico de gallo las hace altas, soberanas, instagrameables. La salsa de chiles guajillo y de árbol, da en el clavo cuando de picor y sabor se habla. El queso se pierde entre tanta frondosidad pero hace su labor y aporta cremosidad. El plato es una serie de aciertos que hace que valga la pena visitar este gran lugar.

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