Fonda Marina
Foto: Alejandra Carbajal

15 Restaurantes de la CDMX recién reseñados

Conoce los nuevos lugares para comer en la Ciudad de México reseñados por nuestros expertos de forma anónima

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¿Quieres descubrir nuevos lugares para comer? Sabemos que tienes tus favoritos, pero siempre te puedes sorprender por los nuevos proyectos gastronómicos en la ciudad. Encuentra los nuevos restaurantes que visitamos en diferentes zonas de la CDMX. 

15 Lugares para comer en la Ciudad de México recién reseñados

  • Italiana
  • Cuauhtémoc
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

¿Eres fan de la focaccia? Ese pan italiano esponjoso y delicioso que conquista por su simplicidad, hay un lugar en la Condesa que solo sirve sándwiches de focaccia.  Olvídate de lujos y manteles blancos, Bocado es una sandwichería informal donde est pan es el protagonista. No esperes un trato de cinco estrellas, pero sí disfruta de un ambiente sin pretensiones, perfecto para introvertidos o para una comida rápida. El menú ofrece 10 opciones de sándwiches, desde los sabores clásicos como la focaccia Roma (mozzarella, jitomate y pesto) hasta la sofisticada Venecia (coppa, crema de parmesano y tartufata). Recuerda que en Italia, estos sándwiches se preparan a temperatura ambiente, así que no esperes que lo sirvan caliente. Probamos la Roma y la Nápoles (roast beef, berenjena, provolone y dijon). La Roma fue nuestra favorita por su sabor tradicional. Queso y jitomate son sabores que siempre cumplen, como en la pizza margherita. En cambio, la Nápoles estaba demasiado fría, lo que influyó en el sabor. Quizá tuvimos mala suerte. Para cerrar con un detalle dulce, pedimos un affogato que fue delicioso. Lo mejor de esta propuesta es la calidad de los ingredientes (muchos de ellos importados de Italia) y la variedad de opciones. Seguramente encontrarás una combinación que te guste. Eso sí, los precios son elevados (mínimo $250 por sándwich) y si tienes prisa, mejor pedir para llevar porque siempre hay muuucha fila.  Adam Vázquez Te recomendamos: Cosimo Pizza

  • Italiana
  • Cuauhtémoc
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

La Nonna, del restaurante italiano María 138 en la Santa María, quiere hacer de estas calles una pequeña Italia. Este año comienza dos proyectos a unos metros del restaurante siciliano: Cosimo, dedicado a la pizza, y próximamente Ninna, enfocado en pasta fresca. Conocí el primero, donde se aleja un poco de Sicilia y voltea a Roma, ya que aquí las reinas de la casa son las pizzas romanas.  Antes que nada, un limoncello spritz, con el limoncello totalmente natural que producen para María 138. Mientras lo tomo, el galardonado chef Daniele Gagliotta (quien colaboró en Cosimo con la Nonna en el desarrollo de las masas) nos habla de qué hace qué hace tan especial a este estilo. La pizza romana se prepara en bandejas rectangulares y no es tan delgada como la Napolitana, pero, aunque tiene más volumen, cae muy bien al estómago gracias a que se fermenta por mínimo 36 horas. También lee: restaurantes de cocina italiana en CDMX  Mientras esperas tu pizza, tienes que picar unas sardinas fritas o las salchichas sicilianas al Suggo, hechas en casa y bañadas en la famosa pomodoro de la Nonna (por cierto, en su cocina no se usa nada enlatado ni artificial).  Luego de probar bocados de varias pizzas, tres fueron las más gustadas: la carbonara, que lleva mozzarella, guanciale (embutido italiano), queso pecorino y, literalmente, salsa como de una pasta carbonara; la Parigina, con salsa de tomate, mozzarella, jamón york y una fina tapa de hojaldre; y, por la que regresaría muchas veces, la Salam

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  • Cafés
  • Cuauhtémoc
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Cafeterías hay muchas, pero pocas ofrecen un lugar cálido para pasar el rato, con buenas opciones de comida y gran café, además de tiendita de objetos de ilustradores independientes, chela artesanal y café en grano. Molona Café en la Doctores poco a poco ha ido ganando fama entre los amantes de esta bebida.  Pedí un flat white y me encontré con una taza intensa, que logró un equilibrio con la leche cremada. Si hablamos de café, tienen métodos de extracción y un menú de bebidas bien cuidado. También lee: Las mejores panaderías en CDMX Para comer pedí el croque Molona, que es pan brioche con jamón, crema y una capa de queso, le agregan pesto para darle un giro inesperado y se acompaña con papas a la francesa. Es un sándwich grande y puede faltarle un poco de humedad, pero debo reconocer que la frescura que ofrece el pesto sorprende. La carta no es extensa, pero al final no importa porque siempre encuentras un plato que disfrutar. Para la opción dulce tienen pan de María Fortunata, galletas y flan casero.  Como me faltaba el postre, pedí el flan y a mi gusto, estaba muy cocido y de consistencia dura, pero de muy buen sabor. Puede ser un gran final para una comida apapachadora.  Debo confesar que es la segunda vez que visito Molona y en ambas he quedado complacida con las bebidas y ahora, con la comida. En el tema de lo dulce, la única decepción fue la galleta de Lotus. Estaba en extremo seca y me pareció un poco confuso que estuviera rellena de crema de cacahuate cuando existe L

  • Peruana
  • Cuauhtémoc
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Hablar de la costa americana del océano Pacífico es hablar de ceviche; nada bueno sale de pelearse por su origen, ya que los cientos de versiones de este plato se extienden desde Chile hasta México. Pero en esta ocasión nos detuvimos en un restaurante que es digno representante en la CDMX de los litorales peruanos, tanto así que "bolichera" le llaman a los barcos pesqueros de aquél país.  Antes que nada, no puedes pasar en este lugar diez minutos sin tener en tu mesa un pisco sour. ¡Aguas!, gracias a su frescura y al aroma cítrico entra muy fácil pero es engañoso, ve con cuidado. Lo segundo que debes considerar, por supuesto, es algún ceviche.  Probé tres, que en palabras del chef Ronal Bautista (Astrid & Gastón, Yakumanka) simbolizan un recorrido por la historia del ceviche. Desde el clásico peruano, (camote, leche de tigre y maíz tostado o canchita); el nikkei, que se refiere a la fusión de la cocina japonesa con la peruana (leche de tigre con mango, aguacate y nori) y uno que era una pequeña muestra de la fusión que él realiza con sabores de México (leche de tigre con jitomate asado, pulpo, pescado, jaiba suave y tomatitos rostizados). El ganador indiscutible: el clásico peruano —empáquenme un garrafón de esa leche de tigre, por favor—.  Los ceviches no nos hicieron olvidar el resto de la carta, la cual es bastante amplia y abarca platos relativamente conocidos, como la causa limeña o el anticucho, pero también otros de los que seguro jamás has oído hablar; pregunta por el

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  • Cuauhtémoc
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Una noche de antro no es noche de antro sin el bien merecido bajón de madrugada. Después de lo bailado, hay que hacer parada en unos sabrosos taquitos nocturnos. No te preocupes si sales con el rímel corrido a las 4am, porque aquí te van a recibir como mereces. Mami Carajo abrió justo abajo del antro CINCODOCE, en la Juárez, con un menú corto pero vencedor qu te va a hacer el paro si andas por la zona durante toda la noche. Una de las estrellas son los tacos Mami, de tortilla de harina grande, con su buena porción de proteína (te recomiendo el campechano), queso gratinado, cebolla caramelizada y una gran —pero muy gran— porción de papas fritas con paprika (literalmente no me las pude acabar). El otro consentido de la carta es el pechuqueso, un taco de pechuga de pollo asada, bañada en salsas negras y envuelta en costra de queso, en tortilla de harina. Al final, no olvides pedir tu flan de cajeta para irte a casa feliz, lo mejor es que los precios son súper accesibles. Te recomendamos: Kinko

  • Fusión
  • Cuauhtémoc
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

Para hacer cocina fusión no basta con tomar ingredientes de regiones completamente separadas del mundo, mezclarlos y esperar que sepan bien. Hay que estudiar mucho la cultura gastronómica de cada sitio y vivir para la prueba y el error; y sí, no siempre va a salir bien. Kinko se estrenó en la Roma como un experimento permanente cuya virtud es justamente que está dispuesto a correr el riesgo.  Las combinaciones de sabores asiáticos y mexicanos de su carta fija se notan coherentes, como el yakitori al pastor o el pok choi con semillas de calabaza garapiñadas, mientras que lo divertido comienza en el omakase de tacos y baos.  Yo comencé mi visita con lo más simple, pero que exige una técnica celosa: el shokupan. Una flor hecha de bollos de pan súper esponjoso que acompañan con una mantequilla de miso (soya fermentada) y totomoxtle. A su lado, el coctel del mes, muy ad hoc para estos calores tropicales, con ron, licor de plátano y jugo de mango-albahaca. Luego, la ensalada de sandía asada con una vinagreta de betabel que nos hizo raspar el plato. Hasta aquí todo tranquilo.  Tembién lee: Deigo sushi en Pasaje Parián A continuación llegó el omakase. Se trata de tres tacos con rellenos asiáticos y tres baos con rellenos mexicanos, que el chef te propone comer en un orden específico. (Ojo, esto solo es sugerencia). Los más ganadores: taco de mejillones al ajillo con jengibre encurtido, el taco de ramen con el caldo reducido hasta lograr una salsa espesa y el bao de plátano frito avel

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  • Cafés
  • Cuauhtémoc

Los cafés modernos donde el diseño es muy importante están de moda y Drippin no es la excepción, no tardas en verlo en Tik Tok. Este nuevo lugar en la Del Valle está hecho para tomarte fotos hasta en el baño, repleto de espejos y luces verdes; también funciona bien para ir a trabajar un rato. Encontrarás mesas pequeñas para dos personas, y en la que elijas tendrás un buen ángulo para fotos que lucirán lindas en tu feed. El lugar ofrece barra de café, bebidas refrescantes y hasta tragos más elaborados. Probé un flat white ($50) que es un doble cortado, aunque parecía más un capuchino. Como llegué a la hora del calor, me recomendaron la limonada Drippin ($75), que preparan con infusión de bugambilia y jarabe de canela. El color rosa es muy llamativo y cumple con su función de refrescarte, mientras que la canela es sutil. También lee: Las mejores cafeterías en Coyoacán Para acompañar mi café pedí un panqué de plátano ($45), que decoraron con una especie de salsa de frutos rojos y algunas berries frescas. La combinación no fue mi favorita porque el sabor del plátano se perdía con las especias. Entrando en materia gastronómica, tienen opciones para picar, así como sándwiches, toasts y desayunos a los que les dan un toque de la casa como sus hotcakes con queso cotija. Opté por un sub Drippin ($180) porque me lo recomendaron mucho. Es un sándwich de carnes frías con lechuga y cebollas encurtidas. La idea es buena y original, pero pudo estar mejor ejecutada. El pan estaba chicloso, y

  • Mexicana
  • Cuauhtémoc
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

El sueño de Nico, Alex y su primo Alberto, que comenzó como un libro –una enciclopedia, mejor dicho– de "Tacos en Tijuana", se expandió a un libro de "Tacos en CDMX" y ahora es una taquería al carbón: Tacos Domingo.  Después de probar y conocer todas las variedades de tacos en el país, los Domingo quieren que tu primera mordida sea de calidad. Sus insumos los consiguen con productores locales para un consumo responsable, provenientes de granjas que trabajan sin crueldad animal.  El menú es sencillo; ofrecen de entrada sus cebollitas con "menjurje", que emula la salsa negra de Tijuana, para dar paso a los tacos de asada, chuleta o costilla. También puedes probarlos en su versión volcán, que es más crujiente; eso sí, el queso se sirve aparte.  También lee: Mami Carajo La salsa y la carne son marinadas al menos quince horas con especias de la casa. Las tortillas vienen de Maizajo y puedes elegir entre harina o maíz. Probamos el taco de asada con queso en tortilla de maíz y, la verdad, con el menjurje de cebollitas y su salsa brava, esa carne suave con olor a carbón te hace agua la boca.  Pide su postre, que viene con cajeta y nuez, un cierre ideal, por no llamarlo "gloria". Tacos Domingo es uno de esos locales que te dan la bienvenida con su gráfica y onda, tan populares estos días para hacer lo que mejor sabemos en las taquerías de pisa y corre: taco recién salido del carbón, al que se le pone salsa, limón y a disfrutar. Te recomendamos: Taquerías muy buenas que tal vez no cono

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  • Cafés
  • Zona Metropolitana
  • precio 1 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

  Si algo agradecemos en estos días es desayunar bien y a buen precio. Que el servicio sea de calidad y, además, el menú venga de la mano de un chef es un plus. En Gran Café Victoria ponen atención a los detalles; desde la masa madre para hornear hasta el cubierto reluciente que colocan en tu mesa. Su gemelo en la colonia Anzures podría tener celos por la ubicación. Y vaya que sí: en medio de la Sinatel y a unos pasos del Cenart (cinco minutos caminando), el aroma del café y los huevos en maíz rojo con chicharrón norteño te atrapan. Al principio podrías pensar que se trata de otra cafetería más, pero una vez que conoces los métodos y el filtrado con los que preparan el café, y ves por su pequeña vitrina el danés de guayaba o el chocolatín, la magia comienza. Mira en este video todo lo que probamos en Gran Café Victoria  Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Time Out México (@timeoutmexico) El lugar es modesto. Cuenta con pequeñas mesas para los vecinos, asiduos comensales, y un comedor ideal para celebrar un cumpleaños o debatir con amigos acerca de lo que viste en la Cineteca de las Artes. Pero nuestra zona favorita en Gran Café Victoria es la mini salita, justo frente a la barra de la cocina, perfecta para pedir una botella de vino y echar novio. Pedimos un Orange Brew que le da la vuelta al clásico café helado con un sutil toque de cardamomo y su respectiva rodaja de naranja. Fresco y cumplidor. Después, a lo que venimos,

  • Mediterránea
  • San Rafael
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out

En el mundo adulto millenial, la mayor emoción que puedes sentir no es comprar una casa (casi seguro que no va a pasar pronto) sino es el día en que sales de vacaciones. Como su nombre lo indica, ese sentimiento de tener tiempo para vivir los días haciendo lo que más te gusta de principio a fin fue la inspiración para crear esta bendita esquina de la San Rafa.  Se trata del nuevo spot que tienes que conocer por su cocina, vinos y tragos mediterráneos, un lugar completamente franco y abierto a la calle, (importante sobre todo en estas infernales olas de calor), con la cocina a la vista y una vibra relax y urbana para pasar toda la tarde y bien entrada la noche entre spritz, vermuts y comida espectacular que cambia cada semana.  Para acompañar mi primer negroni, probé un ñoqui frito coronado con queso stracciatella y durazno, gran augurio de lo que seguiría a continuación.  Según nos explicó el chef Lucas Morris-López, los únicos dos platos que nunca salen del menú son la focaccia, con mantequilla verde y vegetales de la casa; y la ensalada de apio sobre salsa de nuez y mucho queso pecorino por encima. Ambas una hermosura. Luego, puedes pedir recomendación de los vinos naturales o licores importados que tengan disponibles e irte por la pasta fresca en rotación o alguna de las opciones de proteínas, que en mi caso fue un inolvidable pollito frito, súper jugoso por dentro, perfecto y crocante por fuera. Aquí lo difícil va a ser despedirte de estos platos que sólo los comerás una

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